Luego de cuatro años en silencio en medio del desierto rojo de Marte, este podría ser el fin del robot InSight de la NASA.
Los niveles de energía del explorador llevan meses disminuyendo debido al polvo que recubre sus paneles solares. Los controladores en tierra del Laboratorio de Propulsión a Chorro de California sabían que el final estaba cerca, pero la NASA informó que InSight no respondió a las comunicaciones desde la Tierra el domingo.
“Se asume que InSight puede haber llegado al final de sus operaciones”, dijo la NASA a última hora del lunes, añadiendo que su última comunicación fue el jueves. “Se desconoce qué provocó el cambio en su energía”.
El equipo seguirá intentando contactar con InSight, por si acaso.
InSight aterrizó en Marte en 2018 y fue la primera nave espacial en documentar un marsismo, es decir un sismo de marte. Detectó más de 1,300 marsismos con su sismómetro de fabricación francesa, incluidos varios causados por impactos de meteoroides. El terremoto más reciente detectado por InSight, a principios de este año, hizo temblar el suelo durante al menos seis horas, según la NASA.
Las lecturas del sismómetro arrojan luz sobre el interior de Marte.
La semana pasada, los científicos revelaron que InSight consiguió otra primicia: captar un remolino de polvo marciano no sólo en imágenes, sino también en sonido. En un golpe de suerte, la columna de polvo giratoria sopló directamente sobre el módulo de aterrizaje en 2021, cuando su micrófono estaba encendido.
Sin embargo, el otro instrumento principal del módulo solo encontró problemas.
Un dispositivo de excavación alemán, cuya función es medir la temperatura del interior de Marte, nunca llegó a profundizar más de medio metro (un par de pies), muy por debajo de los 16 pies previstos. La NASA lo dio por muerto hace casi dos años.
La NASA aún tiene dos exploradores activos en Marte: Curiosity, que recorre la superficie desde 2012, y Perseverance, que llegó a principios del año pasado.
El lunes, InSight envió la que posiblemente sea su última foto desde Marte. La NASA compartió un mensaje por Twitter en nombre del robot: “Mi batería está realmente baja, es posible que esta sea la última imagen que pueda enviar”.
“No se preocupen por mí: mi tiempo aquí ha sido productivo y sereno. Si puedo, mantendré comunicación con mi equipo de la misión, pero pronto quedaré sin señal. Gracias por estar conmigo”.