Tras siglos de consumo desmedido y enajenación sobre la destrucción de los recursos naturales que sostienen la vida misma, cada día más personas en el planeta cobran conciencia de la urgencia de proteger y respetar el medioambiente.
Jane Goodall, David Attenborough, Greta Thunberg y Al Gore, así como los fenecidos Jacques Cousteau y Berta Cáceres han sido voces contundentes que, como puntas de lanza, han impulsado movimientos de conservación ambiental por todo el globo.
Para fortuna de la humanidad, a sus llamados también se han unido artistas de reconocimiento internacional que han volcado sus talentos en obras de arte creadas con desechos reciclables y magnificado con ellas el llamado a crear ciudades sostenibles.
El catalán Miguel Aparici, el portugués Artur Bordalo, el mexicano Alejandro Durán, el estadounidense Brian Mock y el francés Bernard Pras son solo un puñado de ellos.
En Puerto Rico, artistas como Ferdinand González Rosario del Taller Gallina de Palo y ecologistas como la tejana mexicana Vanessa Pérez Pacheco se han sumado a la corriente para llevar el eco de este mensaje a los 78 municipios del país.
Y Juana Díaz ha sido el primero de ellos.
De la mano de la Fundación WEPA -creada por Vanessa para impulsar la reducción, el reúso y el reciclaje de materiales desechados- Ferdinand diseñó una obra de arte de gran formato en la que resaltan los emblemáticos Reyes Magos de Juana Díaz y que hoy se luce en un espacio prominente del comercio Vital Market, en la calle Federico Degetau.
Pero lo sorprendente es que para su creación no se emplearon lienzos, pinceles, brochas o pintura, sino miles de tapas de envases plásticos multicolores.
“En ese mural de los reyes utilizamos 5 mil tapitas, de todos los tamaños y colores”, precisó Ferdinand en entrevista con La Perla del Sur. “Las de Victoria Secret (lociones) se usaron para la corona de los reyes, porque son doradas y muy vistosas”, agregó.
Las mismas, aclaró Vanessa, se obtuvieron gracias a la colaboración de la propia ciudadanía juanadina y el apoyo esencial del gobierno municipal.
Según explicó, la alcaldía estableció un centro de acopio en las oficinas de Obras Públicas de Juana Díaz, junto al Estadio José Rafael “Palillo” Santiago Alfonso. Allí, todos los habitantes pueden acudir cuando quieran y depositar en dos contenedores las tapas de plástico que WEPA y Gallina de Palo emplearán en sus próximos proyectos.
“Aquí hay una mejor conciencia de reciclaje”, continuó Ferdinand, quien también resaltó que “el programa reciclaje de Juana Diaz está espectacular”.
Solo el comienzo
Ese apoyo, unido al respaldo y conciencia del pueblo, ha provocado que ahora Vanessa y Ferdinand vayan por más.
Según adelantaron, ahora quieren aprovechar la exitosa acogida a la convocatoria de reciclaje para ampliar la obra en exhibición, de 10 pies de ancho en un colosal mural de 40 pies.
“Como artista veo esto como un reto”, puntualizó Ferdinand.
“Esto es algo innovador. Estamos tocando puertas en diferentes pueblos, porque queremos llevar este concepto a todos los pueblos. Nuestra meta es hacer los 78”, añadió.
En lo que eso ocurre, Vanessa y los voluntarios de WEPA semanalmente viajan a Juana Díaz para revisar los contenedores y comenzar un proceso de desinfección.
Para ello sumergen las tapas plásticas en baldes con vinagre y, una vez limpias y desinfectadas, proceden a clasificarlas por tamaño y color, para luego colocarlas en bolsas listas para configurar la paleta de colores de la próxima obra artística.
Para apoyarlos en su gesta y promover el reciclaje de recursos pueden llevar tapas de plástico a las Oficinas del Departamento de Obras Públicas en Juana Díaz, al Centro de Reciclaje de Manatí, y a los supermercados Supermax en la Avenida de Diego y Plaza de Guaynabo.
También puede conocer más accediendo a la red social Instagram como @fundacion.wepa y @fundacionwepa en Facebook.
(Omar Alfonso colaboró en la redacción de este artículo)