La psicóloga corozaleña Yaira Oquendo llegó a Ponce para completar estudios en Medicina y allí echó raíces profundas, pues durante su estancia forjó amistades, tuvo a su hija y se enamoró de la historia y cultura de la ciudad.
Su especialización la llevó a Estados Unidos, donde laboró por espacio de ocho años. Aunque su vida profesional marchaba bien, decidió regresar a Ponce al inicio del año pasado con un ambicioso proyecto en mente.
Según contó a La Perla del Sur, aspiraba desarrollar una hospedería de modalidad bed & breakfast en el casco urbano ponceño que permitiera a los visitantes tener una experiencia de inmersión social y cultural, que custodiara y promulgara la historia de la ciudad, y que también fuera un lugar de resistencia contra la gentrificación.
En aras de ese sueño, Oquendo compró una casa en la calle Salud, diseñada en el año 1912 por el arquitecto Alfredo B. Wiechers Pieretti. En su etapa más reciente, esta propiedad sirvió como hogar de adultos mayores y fue parcialmente destruida por los terremotos del 2020.
Desde entonces, estaba inhabitada. Pero Oquendo vio su potencial y se arriesgó.
“Dije ‘voy a hacer una locura, que no sé cómo salga’. Voy a comprar esta casa, que tiene una historia fascinante”, recordó.
Oquendo tuvo que adquirirla con su capital, al no existir “ningún tipo de fondos para estas casas. No hay hipotecas ni fondos para reconstrucción”. La transacción se completó el 15 de febrero.
Dos días después, el 17 de febrero, se reunió con un arquitecto “que comparte mi visión” y hablaron “de cómo yo podía asegurar la casa”.
“Eso fue viernes, y el lunes mi propiedad estaba en llamas”, indicó.
Ese día, el 20 de febrero, a eso de las 3:00 de la tarde, un fuego se originó en la casa de madera contigua a la propiedad de Oquendo, que también estaba abandonada. La vivienda de madera se consumió y la casa histórica resultó severamente afectada.
“Perdí todo el techo, lámparas y molduras históricas, y las puertas originales también se afectaron, porque los bomberos tuvieron que romperlas para poder acceder a la propiedad y además se quemaron”, detalló.
Además, se incendiaron dos carros que estaban cerca, y dos más tuvieron daños. “Incluso las puertas y ventanas de las casas del frente se rompieron”, resaltó.
Esa misma tarde, otras tres casas deshabitadas se quemaron en la calle Aurora.
“Los bomberos dejaron mi casa en llamas, controladas, porque había otra emergencia. Fue bien horrible ver a las personas envejecientes que viven cerca de esa cuadra caminando desorientadas”, rememoró. “Fue un caos en el sentido del impacto del fuego en los vecinos y las vecinas”.
La División de Explosivos de la Policía de Puerto Rico y el Negociado del Cuerpo de Bomberos iniciaron sus respectivas investigaciones, y posteriormente Oquendo se enteró de un detalle revelador.
“En el transcurso del tiempo, el agente que está investigando me llama y me dice ‘tenemos un vídeo de una persona que entró a la propiedad aledaña y quemó’. Y eso cambia las cosas”, señaló.
Oquendo precisó que el vídeo de una cámara de seguridad cercana muestra a un hombre que entró a la casa de madera, luego se retiró y poco tiempo después se originó el siniestro.
“Se culpa a las personas que tienen problemas de drogadicción y se piensa que ellas son las que están quemando estas casas. Y yo creo que eso no es”, afirmó.
“Yo no dudo que en algún momento haya habido algún accidente por fuego, pero esta persona (del vídeo) se ve con toda la intención, no se ve con la necesidad de consumir sustancias. Hace como una evaluación, entra a la propiedad, sale rapidito como si supiera que algo va a pasar y, varios minutos después, empiezan las llamas”, explicó.
Las autoridades le han dicho a Oquendo que sospechan que esta persona, quien no ha sido identificada, pudiera estar vinculada a otros fuegos suscitados este año en el centro urbano de Ponce.
“Lamentablemente, muchas personas aledañas que tienen cámaras no han querido proveer los vídeos y eso ha impedido el proceso de identificación. Y es un problema más grande, porque quizás tienen miedo a represalias o no entienden la magnitud de esto, que es una persona que intencionalmente está incendiando propiedades en el casco urbano”, expuso.
Oquendo comentó que esta situación ha develado dos supuestos que, a su juicio, deben cuestionarse y combatirse: que las estructuras viejas no sirven y deben ser eliminadas, y que las personas drogodependientes son las únicas responsables de los fuegos ocurridos en la zona histórica de Ponce.
“El estereotipo de que esto es viejo y hay que tumbarlo porque no sirve, es casi como un genocidio del patrimonio arquitectónico y cultural. Está habiendo un asesinato y, quizás la gente se sorprende, pero así, poco a poco, se van perdiendo edificios, la historia y la cultura. Y está el estereotipo de las personas con adicciones, cuando estamos hablando de mano criminal en todo esto”, denunció.
Por lo pronto, la investigación del fuego sigue su curso y Oquendo espera indicaciones para poder terminar de limpiar la propiedad, la cual bautizó como Casa Wiechers Oquendo.
Simultáneamente, ha continuado elaborando su plan de acción, que incluye pulir el concepto de la hospedería y buscar el dinero para la restauración de la estructura.
“Yo quisiera que, en el futuro, cuando pueda ver mi proyecto, mi casa completada, sea un ejemplo anti gentrificación. Y un ejemplo de cómo la diáspora puede regresar, cómo podemos hacer de este un espacio donde se puedan encontrar los mecanismos para que eso suceda y que no se siga desplazando a las personas que por generaciones tuvieron casas (aquí) y que contribuyeron a la ciudad”, sentenció.
Lcda imagino su sentir. También estoy segura q muchonde los fuegos en el casco urbano de nuestra ciudad son a causa de mano criminal. Desconosco quien puede queren deshacerse de tanta historia y cultura. Solo quien no ha vivido. Yo fue maestra y paciente mental. Un día pasando por la calle Reina puse mis ojos en una cada hermosa de techos altos y balcón a la redonda…imaginé ahí un hospital para pacientes mentales, que cada habitación tuviera balcón y vista a la calle o jardines…Fiona terminó por dañarla. Ya no tenía techo…así como usted tuve un sueño. Pues esa población necesita de lugares lindos y apacibles para recuperarse. Una lástima, hubiera sido un bello lugar…
Saludos desde,Bayamón..Muy lamentable lo ocurrido. Espero que puedas loograr tu sueño, Bendiciones..
Que horrible y lamento todo esto Yo compré una en,Guayama y es hermosa aquí es tranquilo y todo hasta ahora bien
La casa de mis abuelos maternos en el callejón Comercio también fue quemada. Mucho que la sufrí. Entiendo su pena. Me fascinan esas casas antiguas,
Esa casa estaba en lo que la nomenclatura de la época era calle Salud número 46 al frente de la Salud 39 donde vivimos de niños.
Esa casa estaba al frente de la Salud 39 otra hermos casa donde vivimos de niños en los ‘60.
Van al tribunal y con una supena el dueño tiene que dar el video.
Siempre he dicho lo mismo. Hay una intención en los fuegos del casco urbano.
Hace algunos años un aventurero de San Juan quiso comprar una franquicia deportiva de Ponce. Recibió múltiples llamadas de Ponceños para decirle como es que se hacían las cosas en Ponce.
🙏Son muchas las propiedades que ahí cuentas sus historias y guardan en silencio… Son muchas las casas históricas que han sufrido tal estrago; me alegra muchísimo que usted Dra.Oquendo pueda aflorar ese pedazo histórico y, vivir con esa pasión de hacer realidad un sueño…Es más veo ese mal momento como uno de gran oportunidad en reconstruir desde 0, para fortalecer la estructura; recuerde por algo pasan las cosas…Muchas más bendiciones 🙏💐 Amo mi pueblo y, recuerde Ponce es Ponce x más calamidades que le atribuyan 💐
Bendito, lo siento mucho. Parece que no es una buena idea decir que se va a remodelar una casa con propósito de evitar la gentrificación, cuando en realidad la casa fue comprada con el propósito de un alquiler a corto plazo, y eso a la larga es desplazamiento y también gentrificación. La gente sabe mas que eso. ¡Que porquería de artículo del Periódico La Perla!