El expresidente Donald Trump está recurriendo, nuevamente, a la Corte Suprema de Estados Unidos, esta vez para pedirle que intervenga y le exima de tener que entregar sus declaraciones de impuestos a una comisión del Congreso.
En una apelación de emergencia presentada el lunes, Trump pidió al tribunal al menos suspender temporalmente la entrega de los documentos por parte del Departamento del Tesoro a la Comisión de Recursos y Arbitrios de la Cámara de Representantes.
Tribunales inferiores han fallado que la comisión sí tiene potestad de obtener los documentos, y han rechazado las denuncias de Trump de que están excediendo su autoridad.
Hace poco, el expresidente le pidió a la Corte Suprema intervenir en una disputa sobre el allanamiento hecho por el FBI a su residencia en Mar-a-Lago en Florida. El tribunal denegó esa solicitud.
Si Trump puede persuadir al tribunal para que intervenga en este caso, podría lograr un aplazamiento de la decisión definitiva hasta el inicio del próximo período legislativo en enero. Y si los republicanos toman control de la cámara baja en las elecciones de noviembre, podrían abandonar el pedido de documentos.
La comisión y su titular, el demócrata Richard Neal, inicialmente solicitó los documentos en 2019 como parte de una investigación en torno a la auditoría que realizaba Servicio Interno de Impuestos (IRS en inglés) a los impuestos entregados por Trump.
Bajo la ley federal, el IRS puede entregar las declaraciones de impuestos de un ciudadano a un grupo reducido de altos legisladores.
Durante el gobierno de Trump, el Departamento de Justicia defendió la decisión del entonces secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, de no entregarle los documentos al Congreso. Mnuchin argumentó que tenía derecho a retener los documentos porque, según decía, los demócratas los querían por razones políticas. A consecuencia, se entabló una demanda.
Una vez que Joe Biden asumió la presidencia, la comisión revisó el pedido y solicitó las declaraciones de impuestos de Trump y otros datos de 2015-2020. La Casa Blanca asumió la posición de que se trataba de una solicitud válida y que el Departamento del Tesoro no tenía otra alternativa que cumplir. Trump entonces recurrió a los tribunales para tratar de frenar la entrega.
El entonces fiscal distrital de Manhattan Cyrus Vance Jr. obtuvo copias de los documentos de Trump como parte de una investigación penal. Ese caso también terminó en la Corte Suprema, que rechazó los argumentos de Trump de que tenía inmunidad.