LOS ÁNGELES – Harvey Weinstein fue declarado culpable el lunes de violación en un juicio en Los Ángeles, en lo que representa otro momento de ajuste de cuentas del #MeToo cinco años después de que el productor se convirtió en un imán para ese movimiento.
Después de deliberar durante nueve días a lo largo de más de dos semanas, el jurado integrado por ocho hombres y cuatro mujeres alcanzó un veredicto en el segundo juicio penal para el que fuera un influyente magnate de la industria cinematográfica de 70 años, quien ha cumplido dos de los 23 años de su sentencia por una condena de violación y agresión sexual en Nueva York.
Weinstein fue declarado culpable de violación, copulación oral forzada y otro cargo de comportamiento sexual indebido en el caso de una actriz y modelo italiana que dijo que él se presentó sin ser invitado a la habitación de hotel de ella durante un festival cinematográfico en Los Ángeles en 2013. El jurado no pudo alcanzar un veredicto en varios otros cargos, en particular los cargos que involucran a Jennifer Siebel Newsom, la esposa del gobernador de California, Gavin Newsom.
El jurado anunció que no pudo alcanzar veredictos en sus acusaciones y en las de otra mujer. En esos cargos se declaró juicio nulo.
Los jurados votaron 10-2 a favor de una condena por agresión sexual a una masajista. La votación fue 8-4 a favor de una condena en los cargos de violación y agresión sexual de Siebel Newsom.
Weinstein también fue absuelto de una acusación de agresión sexual presentada por otra mujer.
Enfrenta hasta 24 años en prisión una vez que sea sentenciado. La fiscalía y los abogados de la defensa no comentaron de inmediato sobre el veredicto.
«Harvey Weinstein nunca más podrá violar a otra mujer. Pasará el resto de su vida tras las rejas, donde pertenece», dijo Siebel Newsom en un comunicado. «A lo largo del juicio, los abogados de Weinstein usaron el sexismo, la misoginia y tácticas de acoso para intimidar, degradar y ridiculizarnos a las sobrevivientes. El juicio fue un claro recordatorio de que tenemos trabajo por hacer como sociedad».
«Es momento de que llegue a su fin el reinado de terror del acusado», dijo la fiscal adjunta de distrito, Marlene Martinez, durante sus argumentos de cierre de la semana pasada. «Es momento de llevar a este personaje influyente ante la justicia».
Ante la falta de evidencia forense o versiones de testigos sobre las agresiones que, según las acusadoras de Weinstein, ocurrieron entre 2005 y 2013, el caso dependió en buena medida de las historias y la credibilidad de las cuatro mujeres.
Entre las acusadoras estaba Newsom, una cineasta de documentales. Su intenso y emotivo testimonio de haber sido violada por Weinstein en una habitación de hotel en 2005 fue uno de los momentos más dramáticos del juicio.
Otra de las acusadoras fue la modelo y actriz italiana, que aseguró que Weinstein la violó en su habitación de hotel.
Lauren Young, la única acusadora que testificó en los dos juicios contra Weinstein, dijo que era una modelo y aspirante a actriz y guionista que se reunió con Weinstein para hablar sobre un guion en 2013, pero él la atrapó en el baño de un hotel, la manoseó y se masturbó frente a ella.
El jurado no pudo alcanzar un veredicto sobre los cargos en el caso de Young.
Una masajista testificó que Weinstein le hizo lo mismo después de recibir un masaje en 2010.
En sus argumentos de cierre, Martinez dijo que las mujeres entraron a las suites de hotel de Weinstein o permitieron que él entrara a las suyas sin tener idea de lo que les esperaba.
«¿Quién sospecharía que un titán de la industria del entretenimiento de tal magnitud sería un violador degenerado?», preguntó.
Las historias de las mujeres hacen eco de los alegatos de docenas de mujeres más que han surgido desde que Weinstein se convirtió en un pararrayos del #MeToo a partir de historias publicadas en The New York Times en 2017. Una película acerca de esos artículos, titulada «She Said», fue estrenada durante el juicio, y se les advirtió repetidas veces a los jurados que no la vieran.