Puerto Rico ha registrado 80 feminicidios en lo que va de año, ocho más que los reportados durante todo el 2023, confirmó a La Perla del Sur la directora ejecutiva del Observatorio de Equidad de Género (OEG), Stephanie Figueroa Figueroa.
La cifra, incluso, es superior a todos los asesinatos por violencia machista registrados durante el año de encierro por la pandemia del Covid, período en el que los incidentes de violencia de género repuntaron en toda la isla. En el 2020, 75 mujeres fueron víctimas de feminicidios.
“Nos asusta, estamos alarmadas, porque la cifra pone sobre la mesa la situación de violencia tan grave en la que vivimos”, reaccionó.
Las estadísticas del OEG revelan otro hecho contundente.
Desde el 2019, año en el que la organización no gubernamental investiga y recopila datos, 416 niñas y mujeres han sido asesinadas “por el simple hecho de ser mujer y porque otra persona, la mayoría de las veces machista, entiende que tiene el poder y el control sobre ella y la vida misma”, puntualizó Figueroa Figueroa.
“Así que tenemos un problema real y nos preocupa que no se esté reconociendo y no se estén tomando medidas afectivas, precisamente, para garantizar la seguridad de las mujeres y niñas de este país”, continuó.
Tendencia en mujeres adultas
Durante los pasados cinco años, Figueroa Figueroa también ha observado que un número mayor de víctimas figura en el renglón de féminas mayores de 50 años, un dato al que deben prestar especial atención familiares y allegados de mujeres adultas que consienten relaciones tóxicas.
“Estamos viendo una mayor cantidad de víctimas de feminicidio que pasan los 50 años de edad. Así que esto no se trata de unos grupos poblacionales en particular, se trata de que todas las mujeres pudieran ser víctimas de violencia de género y, más aún, en la adultez mayor, cuando, por ejemplo, no tengo apoyo familiar, no quiero involucrar a mis hijos adultos en esta situación, no reconozco que estoy en una situación de violencia porque ha sido la manera en que me he relacionado con mi esposo, con mi pareja por los pasados 30 o 40 años, porque ‘para mí, esto es normal’”, agregó la directora del observatorio.
“Hay mucho trabajo de prevención por hacer con estas poblaciones de adultos, precisamente, porque estamos viendo más feminicidios en este sector poblacional”, añadió. «Todas podemos estar expuestas a una situación de violencia de género. Todas”.
Intentos: la cifra oculta
Otro hallazgo relevante refleja que las estadísticas oficiales de la Policía y el Gobierno de Puerto Rico no calibran el volumen de intentos de feminicidios, casos en los que las víctimas sobrevivieron a la agresión.
“Hasta la fecha hemos identificado 68, 68 intentos de feminicidio en el 2024, mujeres que han sobrevivido al intento, gracias a intervención médica”, precisó Figueroa Figueroa. “Así que cuando hablamos de intento, también tenemos una cifra sumamente alta”.
Asimismo, calificó como exageradamente alto el número de mujeres y niñas que permanecen desaparecidas “desde que nosotros comenzamos a levantar esas estadísticas al 2020”.
“Son 88”, sentenció, “88 mujeres y niñas que están desaparecidas”.
Llamado urgente a la empatía y educación
Ante estos escenarios, Figueroa Figueroa urgió a que no se posponga más la implementación de campañas de prevención, masivas y efectivas, al igual que cursos de perspectiva de género en las escuelas.
“Durante muchos años, hemos observado muchos pequeños esfuerzos, pero esto requiere un esfuerzo de país importante”, declaró.
“Y volvemos a insistir en la educación basada en perspectiva de género en las escuelas, un tema que para mucha gente es tabú, pero es porque no se ha sentado detenidamente a escuchar qué es lo que propone una educación con perspectiva de género”, continuó.
“Esta, precisamente, atiende la raíz del problema desde tempranas edades y, a lo mejor, no vamos a ver los cambios ahora, pero sí lo vamos a ver en la generaciones futuras, quienes van a ser adultos que van a poner como prioridad relacionarse equitativamente con los demás, sabiendo y entendiendo que uno no puede tener el poder, el control sobre otras personas, por razón de género”.
El feminicidio se define como el homicidio de una mujer, niña o persona trans por razones de género: una forma extrema de violencia caracterizada por el odio, desprecio y menosprecio hacia las mujeres.