Todos los deponentes que asistieron a la vista pública para atender la Resolución de la Cámara 584, que busca investigar la figura del cuidador familiar de adultos mayores, coincidieron en que estos necesitan mayor atención y ayuda de parte del gobierno.
A la audiencia pública compareció la directora asociada de Alcance Comunitario y Coordinadora del Proyecto de Apoyo al Cuidador Familiar de AARP (American Association of Retired Persons), María De Lourdes Ortiz Rodríguez junto a los cuidadores, Olga Rosa, Wilberto Pagán y Angie Díaz.
“Definitivamente hacen falta mayores recursos para los cuidadores y que el gobierno intervenga y comience a ser parte de estos procesos. Necesitamos ayuda”, alertó Pagán, quien lleva dedicándose al cuidado de adultos mayores por 10 años.
“El paciente y adulto mayor necesita atención, pero aquí no puede quedar en el olvido al cuidador que a corto o largo plazo puede ser igual de vulnerable. Todos necesitamos la misma ayuda”, agregó.
Asimismo, Pagán recomendó establecer Centros de Respiros donde puedan socializar y fortalecer su salud mental, con la intención de “aliviar las cargas de todos los cuidadores de cada paciente”.
“Esta puede ser una buena alternativa para cada personal involucrado en estos procesos de cuido. Se necesita la cooperación de todas las partes para ofrecer la ayuda idónea y correspondiente”, dijo Pagán.
Por otro lado, Olga Rosa, en representación de la también cuidadora, Ramonita Fernández, hizo un reclamo para que los planes de salud les permitan adquirir la cubierta catastrófica, con el fin de que puedan responder por sus pacientes en situaciones donde estén incapacitados.
Según AARP, en la isla hay alrededor de 600 mil personas que cuidan o apoyan a un adulto mayor sin tener el apoyo del sistema.
La pieza legislativa en discusión dispone la creación de un grupo especial de trabajo, tipo task force, para realizar el análisis sobre los cuidadores de adultos mayores.
En la resolución se dispone que el grupo especial de trabajo debe incluir colaboradores externos, representantes de empresas, organizaciones, entidades y otros sectores concernidos con la figura y el rol del cuidador familiar.
El grupo de colaboradores será reclutado en carácter voluntario y provendrán de distintas áreas, entre ellas salud, instituciones académicas, industria de servicios de apoyo social y profesional con peritaje en leyes.
De igual manera, en el grupo habrá un representante del sector de preparación económico laboral, de la población de cuidadores familiares y de AARP Puerto Rico.
Este grupo rendirá un informe con sus hallazgos, conclusiones y recomendaciones, no más tarde de los nueve meses siguientes a la aprobación de esta resolución. El documento debe incluir recomendaciones para atender la diversidad de necesidades que tiene la población de cuidadores familiares.
