El Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas (UNEP) presentó en Barbados un estudio que advierte que para 2050 unas 10 millones de personas en el mundo podrían morir anualmente por la resistencia antimicrobial (AMR, en inglés).
Dicho estudio, expuesto durante el Sexto Encuentro Global de Líderes de Grupo de la AMR, dirigido por la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, enfatiza la necesidad de reducir la contaminación provocada por los sectores farmacéuticos, agrícolas y de salud.
El estudio, a su vez, se concentra en las dimensiones ambientales de la AMR, que amenaza la efectiva prevención y tratamiento de infecciones causadas por microorganismos (bacterias, parásitos, virus y hongos), dado que quien la padece no reacciona al efecto de los antibióticos o antivirales prescritos.
La AMR aparece cuando algunos microorganismos mutan a causa de la sobreexposición o mala exposición a los medicamentos antimicrobianos (antibióticos) y desarrollan resistencia a estas medicinas.
Como resultado, los fármacos son ineficaces y las infecciones persisten en el cuerpo, incrementando el riesgo de que se contagie a otras personas.
La investigación exige además reforzar medidas para reducir la aparición, transmisión y propagación de «superbacterias», microorganismos unicelulares multirresistentes a los antibióticos que no conocen fronteras y que han provocado la muerte a humanos, animales y plantas.
«La crisis ambiental de nuestro tiempo es también de derechos humanos y geopolíticas. El reporte de resistencia antimicrobial es otro ejemplo de desigualdad, en el que la crisis de la AMR es desproporcionada afectando países del Sur global», expresó Mottley en el acto.
El estudio, igualmente contiene medidas que propone atender la disminución del ambiente natural y el aumento de la AMR, con el objetivo de abordar principalmente los recursos de contaminación de parte del precario sector sanitario, aguas residuales y los desperdicios municipales y comunales.
Asimismo, el análisis recomienda crear un gobierno robusto y una infraestructura de planificación, legal y reguladora a nivel nacional, y que se aumenten los esfuerzos globales para mejorar la integración del manejo del sector del suplido de agua.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el AMR se ubica entre las primeras diez amenazas contra la salud en el planeta.
En el año 2019, se estimó que 1.27 millones de las muertes en el mundo fueron directamente atribuidas a infecciones resistentes a fármacos.
Y, en general, alrededor de 5 millones de las muertes fueron asociadas con la bacteria AM, por lo que se espera que para el año 2050 unas 10 millones de muertes sean directamente asociadas con la AMR, equivalente al total de defunciones provocadas por el cáncer en 2020.