Para proteger a las farmacias comunitarias y el acceso a servicios de salud en Puerto Rico, el presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD), Ramón Barquín, instó este lunes a la Administración de Seguros de Salud (ASES) a mantener la estructura la red actual de farmacias del Plan Vital.
La preocupación de algún cambio surge tras la petición de varias asociaciones para que se les permita a estos pacientes acceder a los servicios de las farmacias Walgreens.
“Solicitamos al gobierno que no negocie términos que perjudiquen el trabajo que realizan las farmacias comunitarias, las cuales han demostrado ser un pilar fundamental en la salud de nuestro pueblo”, señaló Barquín en declaraciones escritas.
Destacó que las farmacias comunitarias representan más de 850 establecimientos, generan 14 mil empleos directos y 5 mil indirectos, y atienden a 1.3 millones de pacientes, subrayando que muchas de estas operan bajo estructuras cooperativistas comprometidas con la salud pública.
Barquín advirtió que la inclusión de grandes cadenas internacionales en la red del Plan Vital podría ocasionar el cierre de una de cada cinco farmacias comunitarias y la pérdida de cientos de empleos.
“Las pequeñas y medianas farmacias han mostrado una fidelidad inquebrantable, incluso en circunstancias adversas, y deben ser protegidas”, afirmó.
El presidente del CUD exhortó al gobernador, al director de ASES, a los secretarios de Salud y Desarrollo Económico, y a la gobernadora electa a reafirmar su compromiso con las micro, pequeñas y medianas empresas, al preservar “una política pública que ha funcionado de manera efectiva durante las últimas dos décadas”.