Tras un requerimiento del director ejecutivo de la Autoridad de las Alianza Público Privadas, Fermín Fontanés, el secretario de Justicia de Puerto Rico, Domingo Emanuelli, dio a conocer días atrás una opinión en la cual expresa que el contrato con LUMA Energy es legal.
Esta opinión contradice el análisis llevado a cabo por múltiples juristas, así como expertos en finanzas, economía, ingeniería y el ambiente, quienes han examinado el contrato y opinado que en nada beneficia al pueblo de Puerto Rico.
Al examinar detenidamente la opinión, sin embargo, se descubren fallas fundamentales que la hacen totalmente inválida.
Primero, hay que mirar el contexto.
El actual secretario del Departamento de Justicia es un funcionario de confianza del gobernador Pedro Pierluisi. Como funcionario de confianza, el gobernador podría despedirlo en el acto, incluso, utilizando un mensaje de texto. Por tanto, el secretario no tiene otra alternativa que apoyar la política del gobernador.
Tampoco es casualidad que esa opinión haya surgido en la semana que el gobernador libra una aguerrida defensa del contrato de LUMA Energy, semana en la que el gobernador mismo encarna un operativo de medios para convencer al pueblo para dejar el contrato en vigor.
Cualquier opinión contraria a la legalidad del contrato con LUMA, le habría costado el puesto al secretario Emanuelli. Quien no lo crea, que le pregunte al pasado secretario del DACO.
Por otro lado, al ir a los méritos de la opinión, se descubren otras fallas dramáticas.
Las alegaciones más importantes contra el contrato no son que el procedimiento empleado para aprobar el acuerdo entre el gobierno y LUMA se apartó sustancialmente a la ley. Sin embargo, el secretario concentra sus argumentos para plantear que los trámites para la aprobación del contrato se hicieron conforme a la ley.
Eso no es lo importante, ni lo que anula o hace ilegal el contrato. Lo importante es que el contrato es contrario a la ley y orden público, porque es leonino.
Aun así, sobre ese evidente y trascendental asunto, la opinión es silente.
Como hemos explicado en múltiples ocasiones, un contrato leonino es aquel en cual la mayoría de sus cláusulas favorece a una sola parte o perjudica a una de las partes del contrato. En este caso, el análisis que se ha hecho -y que nadie ha refutado- es que la inmensa mayoría de las cláusulas del contrato con LUMA Energy perjudican a la Autoridad de Energía Eléctrica y al Gobierno de Puerto Rico.
¿Por qué el secretario Emanuelli obvia esto? ¿Por qué, cuando en su opinión discute cuándo es que los contratos son o no legales, olvida mencionar que los contratos leoninos son nulos?
Porque su análisis es totalmente superficial.
Al no utilizar la doctrina jurídica del contrato leonino, no entró en el contenido de las cláusulas para evaluar a quién benefician o perjudican. Por eso la opinión es ingenua, pues no sopesa el efecto de las cláusulas del contrato en las partes. Al no entrar en el contenido de las cláusulas, el secretario no tiene idea de lo que está hablando.
No obstante, el contenido de las cláusulas sí ha sido analizado por múltiples organizaciones que, efectivamente, han concluido que perjudican a la Autoridad de Energía Eléctrica y al pueblo de Puerto Rico. Entre ellas IEEFA, el Colegio de Ingenieros y Arquitectos de Puerto Rico, el Centro para la Nueva Económica, el Sierra Club, la Asociación de Economistas de Puerto Rico, Earthjustice, la UTIER, la Legislatura de Puerto Rico y el Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico.
El secretario, en su lugar, se fue por la tangente para no tener que entrar en los méritos del planteamiento de que el contrato es leonino. Por eso, su opinión no es más que un sello de goma de lo que piensa el gobernador.
Por tanto, el valor de la opinión del secretario de Justicia se limita a demostrar que, desafortunadamente, el licenciado Domingo Emanuelli se ha unido a la pléyade de pasados secretarios y secretarias de Justicia que no han tenido independencia de criterio y verticalidad para determinar lo que claramente establece la ley.
Quien tiene que demostrar el desempeño de LUMA es LUMA. Me declaro ignorante absoluto del Derecho, mas en una breve clase requisito de jurisprudencia, mencionó el profesor esta frase:
“Res ipsa loquitur” = las cosas hablan por sí mismas, o como dijo el cantante Juan Gabriel: -“Lo que se ve, no se pregunta”.
Racionalizar lo que los 5 sentidos captan, jamás mejorará este ineptitud.
Ya no pudieron, ya que se quiten y dejen a quien bien pueda.
Ay Visnen, cuando se retire El Secretario de Justicia actual puede trabajar en la Sastrería del Gallo en Cabo Rojo!!!