La posibilidad de adquirir una vivienda en Puerto Rico continúa reduciéndose, según el Índice de Vivienda Asequible publicado por Estudios Técnicos, Inc. (ETI). El índice cayó a un promedio de 57 por ciento en 2024, su nivel más bajo en años recientes, lo que refleja una creciente dificultad para acceder al mercado hipotecario.
De acuerdo con Leslie Adames, director de Análisis y Política Económica de ETI, el índice disminuyó de 58 por ciento en el cuarto trimestre de 2023 a 53 por ciento en el mismo periodo de 2024. “No cabe duda de que el problema de asequibilidad continúa profundizándose y eso es preocupante, sobre todo cuando la cifra apunta a que unas personas interesadas en obtener un préstamo hipotecario solo contaban con un 57 por ciento del ingreso requerido por las instituciones financieras para cualificar”, expresó.
El índice mide la capacidad de una familia promedio para cualificar a un préstamo hipotecario con un 20 por ciento de pronto pago. Un valor de 100 por ciento indica que los ingresos del hogar son suficientes para comprar una vivienda promedio; cualquier cifra por debajo refleja dificultades de acceso.
Aunque las tasas hipotecarias a 30 años bajaron de 7.06 por ciento en mayo a 6.72 por ciento en diciembre de 2024, siguen siendo elevadas comparadas con el promedio prepandemia de 4.04 por ciento.
“El hecho que la tasa de interés a largo plazo continúe experimentando presión al alza y que persista la falta de inventario de vivienda no sugiere espacio para una normalización de la asequibilidad a niveles prepandemia”, añadió Adames.
La situación podría empeorar con el alza en el costo de materiales de construcción, debido a los aranceles sobre acero y aluminio impuestos por la administración Trump. La tasa ya elevada de 25 por ciento, podría aumentar al 50 por ciento este miércoles, 4 de junio, lo que encarecería aún más las viviendas nuevas.
Según la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras, el precio promedio de una unidad nueva subió un 18.4 por ciento en 2024, alcanzando los $367,716, mientras que las unidades usadas aumentaron un 12.8 por ciento, con un precio promedio de $212,811. En total, se vendieron 9,996 unidades durante el año, una baja del 7.5 por ciento respecto al 2023, lo que representó una merma de 814 unidades.