Trabajadores de Starbucks en todo Estados Unidos iniciaron una huelga de tres días a partir de este viernes como parte de su campaña para formar un sindicato de toda la cadena de cafeterías.
Alrededor de un millar de empleados en 100 locales planeaban parar, según Starbucks Workers United, la agrupación que organiza la campaña. Será el paro más prolongado de la campaña de sindicalización, que ya lleva un año.
Es la segunda huelga que realizan los trabajadores de Starbucks en un mes. El 17 de noviembre, trabajadores de 110 locales en Estados Unidos pararon durante un día. La medida de fuerza coincidió con el Día de la Copa Roja, en el cual la empresa entrega copas reutilizables a los clientes que piden una bebida especial navideña.
Unos 260 de los 9,000 locales de la empresa en Estados Unidos votaron a favor de la sindicalización a fines del año pasado.
Starbucks se opone a la sindicalización y dice que la empresa funciona mejor cuando mantiene una relación directa con los empleados. Pero dice que respeta el legítimo derecho de los trabajadores a protestar.
Tori Tambellini, una organizadora sindical que era supervisora de turno de Starbucks hasta que fue despedida en julio, dijo que participará en un piquete en Pittsburgh el fin de semana. Sostuvo que los trabajadores protestan por la falta de personal y los métodos de la empresa contra la sindicalización, que incluyen el cierre de locales que se han sindicalizado.
Workers United señaló que Starbucks cerró recientemente el primer local que se sindicalizó en Seattle, donde se encuentra la sede de la empresa. La empresa dijo que lo cerró por razones de seguridad.
Starbucks y el sindicato han iniciado negociaciones por el contrato en unos 50 locales, pero no han llegado a acuerdos.
El proceso ha sido contencioso. Según la Junta Nacional de Relaciones Laborales de Estados Unidos, Workers United ha presentado 446 acusaciones contra Starbucks desde el año pasado, tanto por el despido de organizadores sindicales como la negativa de la empresa a negociar. Por su parte, la empresa alega que el sindicato viola las normas de la negociación al grabar las sesiones y publicarlas online.
Hasta ahora, las disputas aparentemente no han afectado las ventas de Starbucks, que informó en noviembre que sus ingresos aumentaron 3 por ciento a $8,410 millones en el trimestre julio a septiembre.