Las únicas fallas de José Ramírez llegaron en los swings que le hubieran permitido unirse a un club muy selecto en la historia.
El dominicano consiguió jonrón en sus primeros tres turnos, y desde ambos lados del plato, para guiar el jueves a los Guardians de Cleveland hacia una victoria de 10-3 sobre los Red Sox de Boston.
El antesalista conectó un cuadrangular solitario en la primera entrada frente a Matt Dermody (0-1), uno de dos carreras en la tercera —el número 200 en su carrera— y otro solitario en la sexta, durante la cual, los Guardians batearon para el ciclo, sumaron ocho hits y anotaron cinco veces.
Ramírez, bateador ambidiestro, consiguió los primeros dos vuelacercas como derecho y el otro como zurdo.
El garrotazo de Ramírez en el sexto episodio llegó ante su excompañero Corey Kluber y permitió que el astro llegara a nueve en esta temporada. Con ello, rebasó a Travis Hafner como el noveno mejor jonronero en la historia del club, con 201 vuelacercas.
Ramírez vino de nuevo a la caja de bateo en el sexto capítulo, cuando 10 Guardianes desfilaron por el plato. Se ponchó para que concluyera el inning.
Y en el octavo, pegó una roleta inofensiva a la antesala.
«En mis últimos dos turnos, hice el swing a bolas malas», admitió.
Su juego de tres jonrones es el cuarto que se registra esta temporada en las Grandes Ligas, luego del conseguido por el cubano Adolis García con Texas el 22 de abril; el logrado por Paul Goldshmidt con San Luis el 7 de mayo, y el registrado por el colombiano Jordan Díaz el 9 de ese mismo mes.
Hubo un pelotero de Cleveland que logró cuatro vuelacercas en un juego, Rocky Colavito, el 10 de junio de 1959. El último duelo de cuatro jonrones en las Grandes Ligas fue de J.D. Martínez con Arizona, el 4 de septiembre de 2017.
Sólo ha habido 16 casos en que un bateador suma cuatro jonrones en un mismo juego desde 1901.
«Todos en el clubhouse dicen lo mismo, él es el mejor pelotero que hay», dijo el abridor de Cleveland, Aaron Civale, en referencia a Ramírez. «Juega de la mejor manera posible cada noche. Quizá no esté en el papel como los más talentosos, tal vez muchos no lo consideren el mejor. Pero cuando juega como sabe hacerlo es el mejor».
Ramírez mostró también sus virtudes defensivas en la sexta entrada. Con el guante volteado, atrapó un potente batazo de Justin Turner y, sin apoyarse bien envíó un tiro de un extremo al otro del diamante, para retirar al antesalista.
Civale (2-1) tuvo su segunda salida destacada por Cleveland, tras pasar 46 juegos en la lista de los lesionados por un tirón de oblicuos.
Por los Red Sox, el dominicano Rafael Devers de 3-0. El puertorriqueño Kiké Hernández de 4-1.
Por los Guardians, los dominicanos Amed Rosario de 5-1, Ramírez de 5-3 con tres anotadas y cinco producidas. El venezolano Andrés Giménez de 4-2 con una anotada y dos impulsadas.