El puertorriqueño Martín Maldonado fue el compañero de batería del dominicano Framber Valdez en el juego sin hit que consiguió por los Astros de Houston ante los Guardianes de Cleveland. Con ello el boricua ha sido el receptor en tres juegos con doble cero y alcanzó el tercer sitio en la historia de las Grandes Ligas.
Y para nadie familiarizado con los Astros es una sorpresa el que Maldonado haya estado detrás del plato en tantas proezas de los lanzadores.
«Es uno de los tipos que más duro trabajan en este equipo… es esencialmente como nuestro quarterback», dijo el taponero Ryan Pressly.
El martes marcó la primera ocasión que Maldonado fue cátcher en un juego sin hit por parte de un solo pitcher. Hizo historia en las mayores el año anterior, cuando se convirtió en el primer pelotero en fungir como receptor en dos juegos sin hit logrados en forma colectiva. Los dominicanos Cristian Javier y Héctor Neris, así como Pressly, se combinaron para dejar en doble cero a los Yanquis de Nueva York el 25 de junio.
Ello llegó después de que Maldonado trabajó como receptor en un sin hit combinado, por parte de Aaron Sánchez, Will Harris, Joe Biagini y Chris Devenski frente a Seattle, el 3 de agosto de 2019.
«Es una gran persona y significa mucho para mí», dijo Javier. «Para mí es casi como si Dios nos lo hubiera puesto ahí para guiarnos en estos juegos».
El puertorriqueño, quien está en su 13ra campaña en las mayores, se dice orgulloso de tener su lugar en los libros de récords al actuar como cátcher en un juego sin hit por tercera vez. El panameño Carlos Ruiz y Jason Varitek son los únicos receptores con más juegos sin imparable que él —ambos comparten el primer sitio, con cuatro cada uno.
Maldonado destacó que su éxito detrás del plato no ha llegado fácilmente. Ha requerido horas de trabajo y estudio fuera del terreno.
Habló de que intenta trazar los planes para los encuentros en casa, durante las noches, mientras que sus dos hijos pequeños parecen concentrarse en distraerlo.
«Son muchos sacrificios. Me quedo despierto hasta la noche leyendo reportes… Y quien tenga niños sabrá que estarán saltando encima de uno», relató. «Así que hay que darles un papel y decirles: ‘Oigan, trabajen conmigo’. Y se ponen a escribir cosas locas en el papel».
Ante esos esfuerzos, Maldonado agradece que la gente le reconozca lo que hace para ayudar al equipo.
«Creo que se nota el trabajo que dedico todo el tiempo, diariamente para estar en un juego o armar un plan», indicó. «Y esto hace que uno piense que vale la pena cada minuto».
El cátcher de 36 años es el titular de Houston. Ha jugado 79 duelos en esa posición durante esta campaña. Pero algunos han criticado al manager Dusty Baker por preferirlo a él y no al novato dominicano Yainer Díaz, incluso con los problemas evidenciados por Maldonado con el bate.
Maldonado tiene un promedio de apenas .167, con dos vuelacercas y 18 impulsadas en esta campaña. Díaz comenzó el miércoles bateando para .276 con 13 jonrones y 31 empujadas en 66 compromisos, divididos principalmente en funciones de bateador designado y cátcher.
Ciertamente, Baker ha escuchado las críticas. Pero no le preocupan. Le importa más lo que su cátcher le aporta a la defensiva que lo conseguido con el madero.
«Lo he dicho antes. Esto encuentra oídos sordos… Él significa mucho para nuestro cuerpo de pitcheo».