La reparación de carreteras, puentes y vados, así como las obras de mitigación por derrumbes y deslizamientos de tierra ocurridos en las pasadas semanas, se harán con prioridad en los barrios rurales de Ponce, aseguró este jueves el alcalde Luis Irizarry Pabón.
Su optimismo descansa en el pacto al que llegó con la secretaria de Transportación y Obras Públicas, Eileen Vélez Vega, durante la visita que realizó el martes a las vías más afectadas por el huracán Fiona y los eventos de lluvias posteriores.
“Hay un compromiso de atender la situación de emergencia de manera rápida. Ya esta semana están trabajando con las cosas que se puedan arreglar en el momento”, aseveró el alcalde, al referirse, por ejemplo, a la instalación de gaviones.
“Las situaciones de Guaraguao, La Yuca y Hogares Seguros sé que se les van a estar dando atención inmediata”, agregó.
Asimismo, indicó que los barrios Real Anón, Tibes y Montes Llanos forman parte de la lista prioritaria.
En estos sectores también se han afectado carreteras estatales y municipales. Irizarry Pabón dijo que el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) cuenta con una partida para pagar por estas tareas, pero que también solicitará fondos de emergencia.
En el caso del ayuntamiento, lo hará con una partida millonaria asignada previamente, al igual que con fondos de emergencia.
“Las carreteras municipales de Ponce se iban a estar trabajando en octubre, pero las lluvias han detenido este proceso. Tenemos una asignación de $10 millones para asfalto en carreteras municipales. Tan pronto se normalice y deje de llover, se comenzarán esos trabajos”, señaló.
Peligro inminente
Por otro lado, el municipio está pendiente a situaciones de riesgo por derrumbes y deslizamientos en varias comunidades, como el terreno socavado en la urbanización Jardines del Caribe, donde varias familias ya desalojaron sus residencias, dijo el alcalde.
“También mandamos a desalojar personas en Montes Llanos, sector El Seto, donde las carreteras estatales y municipales han cedido”, sostuvo.
Además, cinco viviendas de Estancias del Golf están en peligro por un talud, mientras una calle de Valle Real se está hundiendo.
“En el Cerro Mora en La Cantera tenemos la planta Portugués que tiene un tanque que, al estar cediendo el terreno, hay alta peligrosidad de un derrumbe mayor. A esto se le va a dar atención. No quiero generar alarma, pero pudiera ser parecido a lo que pasó hace 37 años en Mameyes. Hay de tres a cinco casas que están en peligrosidad y ya hemos hablado con los residentes que están más cercanos. Los expertos van a evaluar para determinar cómo proceder”, explicó.