La coalición Queremos Sol exigió que el gobierno de Puerto Rico posponga la entrada de la empresa Genera PR como administradora de la generación de energía en el país, pautada para el 1 de julio.
A tales fines, la coalición le envió una carta a la secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, quien fue designada por el presidente Joe Biden para supervisar el proceso de transformación del modelo energético de la isla.
La decisión de recurrir a Granholm, indicó el grupo, estuvo motivada por la “incapacidad mostrada por el Negociado de Energía de Puerto Rico de ejercer la supervisión que se le encomienda como regulador”.
“En otras jurisdicciones que se enfrentan a un sector eléctrico privatizado, tal vez se podría recurrir al regulador para definir e implementar las políticas necesarias para proteger y defender el interés público. Desafortunadamente… el Negociado de Energía, no es tal entidad”, indica la misiva fechada el 25 de mayo.
Aunque la petición principal de Queremos Sol a Granholm es que se cree una nueva corporación pública que convierta el sistema eléctrico en uno basado en fuentes de energía renovables, determinaron solicitarle que retrase la entrada de Genera PR, al menos, para que no esté al mando durante la venidera temporada de huracanes.
“Sin embargo, reconociendo que el establecimiento de este nuevo modelo de gobernanza tomará algún tiempo, y que Genera se hará cargo de las operaciones de generación en poco más de un mes, le pedimos que solicite al gobierno de Puerto Rico que posponga la toma de control de las operaciones por parte de Genera hasta después de diciembre de 2023, más allá de la temporada de huracanes”, dijo el grupo en la carta.
Empresas “inexpertas”
Queremos Sol señaló que tanto Genera PR como LUMA Energy, que tiene a cargo el sistema de transmisión y distribución de energía desde el 1 de julio de 2021, son operadores “inexpertos”, lo que pone en un estado de vulnerabilidad a la población de Puerto Rico.
“El frenesí de la privatización del sector eléctrico impulsado por la Junta de Control Fiscal y el gobierno de Puerto Rico está colocando a cada residente y negocio en un mayor riesgo tanto en condiciones normales como críticas”, expuso la coalición.
Igualmente, recordó el historial en Puerto Rico de la empresa matriz de Genera PR, New Fortress, que incluye la construcción y operación de una terminal de importación de gas licuado sin los permisos locales necesarios y en violación de los requisitos de la Comisión Federal Reguladora de Energía.
“Además, New Fortress no cumplió, mediante un acuerdo anterior, las obligaciones contractuales con la AEE para el suministro de gas natural”, resaltó el grupo.
Asimismo, Queremos Sol puntualizó que Genera PR “no ha podido reclutar el personal necesario y calificado para operar las centrales eléctricas”.
Por otra parte, la coalición reiteró su propuesta de que los fondos federales asignados a transformar el modelo energético de Puerto Rico se utilicen para construir un sistema descentralizado basado en la producción de energía solar en el punto de consumo, es decir, en los techos de residencias y comercios. El grupo también favorece la instalación de equipos solares en terrenos urbanizados o en desuso como estacionamientos o antiguos vertederos, que puedan servir la demanda cercana.