Decir que hacen malabares resulta poco.
Los 21 pescadores que utilizan el muelle del sector El Boquete en Peñuelas ponen su vida en riesgo cada vez que salen o regresan de trabajar debido a que la estructura está en ruinas.
Tomando en cuenta que la mayoría de los pescadores rebasa los 50 años de edad, sufren condiciones de salud y problemas de movilidad, la instalación constituye una amenaza a su seguridad.
Debido a que el muelle tiene la madera desplazada, varillas expuestas y huecos enormes, estos trabajadores necesitan que, al menos, dos compañeros tiren sus embarcaciones al agua con la ayuda de una guagua pickup. Para sacarlos, requieren remolque, con el vehículo de motor, a tierra firme.
“Se supone que, si hubiera un deck, una especie de muellecito a vuelta redonda más bajito, vienes y te pegas con el bote, te amarras y bajas el equipo. Ahora tienes que quedarte en el bote y alguien sacarte”, explicó el pescador Billy Ramos.
El huracán María azotó severamente el muelle y, ante la inacción gubernamental para repararlo, los socios de la Pescadería Santo Cristo de la Salud lo remendaron como pudieron, con sus propios recursos.
En el 2020, los terremotos le asestaron otro golpe al muelle, pero fue el huracán Fiona el que lo terminó de inhabilitar el año pasado.“Nosotros le pusimos unos cuantos palitos y vino Fiona y se lo llevó otra vez. Después hicimos una balsa (con madera, neumáticos y zafacones) y se le fueron hasta los drones”, narró Ramos a La Perla del Sur.
“De María para acá (las autoridades gubernamentales) no han hecho nada”, puntualizó. “Eso lo hicimos nosotros con los chavos de nosotros. Nadie nos ayudó”.
Su colega Sixto López, de 64 años de edad, resaltó la creatividad del colectivo para resolver.
“Estas no son condiciones adecuadas para trabajar, ¡claro que no! Pero nosotros tenemos que inventárnosla”, dijo López, un guayanillense que ha pescado “desde muchacho” y forma parte de esta asociación desde la década del 80.
Sin embargo, el propio López es ejemplo de que la plataforma flotante es una amenaza a la seguridad de cualquiera, ya que la caída que sufrió allí recientemente lo llevará al quirófano.
“Desde esa plataforma, como no es estable, me pegué al muelle, perdí el balance y me caí a la plataforma”, relató. “Tengo una fractura en este hombro (izquierdo) que me voy a operar ahora. Me van a hacer una reconstrucción del hombro”.
“Y ¿a quién yo le voy a reclamar eso?”, cuestionó.
Este accidente no ha sido el único reportado entre pescadores, pero sí el más grave. “Ahí nos hemos caído un montón”, puntualizó López.
No llega la reconstrucción
Desde el 2017, funcionarios del gobierno municipal, estatal y federal han visitado el muelle incontables veces. Pero todavía la reconstrucción no tiene fecha de inicio.
“Ellos han venido aquí un montón de veces, cada cuatro a seis meses, sacan una cinta y miden lo que han medido ya tantas veces”, criticó Ramos.
El administrador de la pescadería, Guillermo Ortiz, confirmó la aseveración. “Han venido un chorro de veces a medir, a hacer lo mismo, y todavía no empiezan”, manifestó. “Esto cansa y lo que da es dolor de cabeza”.
La inacción, de paso, ya provoca hastío entre los trabajadores. “Yo no creo en nadie, hasta que lo vea”, agregó Ortiz.
Y esa incredulidad lo tiene pensando en hacer su propio muelle, aunque no tenga autorización del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), la agencia con jurisdicción sobre la estructura.
“Lo que estamos esperando es una ayuda del Club de Leones de Peñuelas y, si me la dan, lo voy a empezar a hacer. No voy a esperar por nadie”, afirmó.
“No me importa que venga Recursos (Naturales) y me multe. Nos vamos a corte hasta lo último, porque no puedo esperar. Esos muchachos ahí están inválidos. Hay que montarlos en el bote y tirarlos para que puedan ir a pescar. ¿Vamos a seguir así? ¿Seis años en lo mismo? Esto cansa”, agregó Ortiz.
“Va a tardar”
De otra parte, el alcalde de Peñuelas, Gregory Gonsález Souchet, informó que el proyecto de reconstrucción del muelle en El Boquete cuenta con una asignación de cerca de $300 mil de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés).
Dijo, además, que la empresa SEM elaboró el diseño, pero los terremotos del 2020 provocaron que FEMA solicitara la enmienda del documento para adaptar el proyecto a la nueva realidad sísmica del sur.
Más de tres años después de los temblores, todavía se espera por varias autorizaciones para que pueda pasar a la fase de construcción.
“Ya se recibió el diseño y se sometió a FEMA, y estamos esperando su aprobación. Una vez FEMA apruebe, entonces se requiere, tanto la autorización de Recursos Naturales como del Cuerpo de Ingenieros (del Ejército de Estados Unidos) para poder proceder”, detalló el alcalde en entrevista con este medio.
En un intento por acortar el tiempo de construcción, Gonsález Souchet pondera la posibilidad de hacer las reparaciones con brigadas municipales, en lugar de publicar una subasta para elegir a un contratista.
“Si recibimos la autorización del Cuerpo de Ingenieros, que esa es la parte más tediosa y que, si ha tardado, aún más va a tardar, podemos trabajarlo también a través de las brigadas municipales que hemos contratado para los proyectos de reconstrucción”, anticipó.
Esas brigadas trabajan, actualmente, en las reparaciones de la cancha Miriam “Betty” Segarra, un puente de acero en El Rucio, y el centro comunal, la cancha y el parque de béisbol del sector La Carcajada.
Ante la pregunta de por qué el gobierno no ha hecho un arreglo provisional en el muelle, el alcalde apuntó a las agencias de corte ambiental.
“Ni siquiera es FEMA, más bien es por las políticas del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales y del Cuerpo de Ingenieros, porque hacer cualquier movimiento allí podría… De hecho, sé que Recursos Naturales ya le ha llamado la atención a algunos pescadores que han estado trabajando en el área con madera y les han advertido que podrían multarlos, y así nos lo han expresado, si ponen un clavo más allí”, detalló.
¿Eso le parece razonable?, se le preguntó.
“No, claro que no, porque si no fuese por eso hace tiempo hubiésemos hecho un proyecto para poder mitigar temporeramente, que es lo que yo quisiera hacer”, respondió.
El alcalde mencionó que le solicitó a la secretaria del DRNA, Anaís Rodríguez, que lo autorizara a revestir el muelle con madera nueva, pero no ha recibido respuesta.
El alcalde es un mentiroso,desde el huracán María para acá dice todos los años que lo van a construir y así lleva hasta el presente.A mi personalmente en una actividad en el centro comunal de Tallaboa hace un año atrás me dijo que tiene el dinero en su poder.Como es posible que en 4 años todavía las supuestas agencias no han dado autorización para la reconstrucción? Ahooooraaaa…cada vez que hay alguna tormenta si sabe reclamarlo nuevamente! Encima de eso van a cada rato a tomarse fotos para fingir que van o que están haciendo algo,otra clasica pantomima de los políticos de este país pero sin resultados.