- El director estatal de AARP Puerto Rico, José Acarón, estimó en más de $3 billones anuales el valor económico de los servicios que brindan los cuidadores informales a familiares con fragilidad, si estos fueran compensados por el gobierno.
En vista pública de la Comisión de Adultos Mayores y Bienestar Social, que preside el representante Ricardo Ocasio Ramos, Acarón destacó que en Puerto Rico más de 500 mil personas apoyan a un ser querido mayor, lo que convierte a este sector en “la espina dorsal del continuo de cuido en Puerto Rico”.
“En el caso de Puerto Rico, dada la prevalencia del cuidado informal, se estima que hay sobre 500 mil personas que apoyan a un ser querido mayor con fragilidad y que aportan a nuestra economía sobre $3 billones anuales”, puntualizó.
La vista giró en torno al Proyecto del Senado 652, que enmienda la Ley sobre la Política Pública del Cuidado de Puerto Rico para atemperarla a la ley federal RAISE Family Caregivers Act de 2017. La medida busca ampliar derechos, adiestramiento y apoyos para los cuidadores informales, quienes muchas veces deben dejar sus empleos para atender a sus familiares.
Durante la audiencia, Nicole Báez Ortiz, del Departamento de la Familia, informó que hasta la fecha se han registrado 100 cuidadores en el sistema oficial. En tanto, Josué Pérez Román, de ASSMCA, alertó que un 68 por ciento de los cuidadores atendidos en 2016 presentaban síntomas de “burnout”.
El subsecretario de Salud, doctor Luis Olmedo Morales, recalcó que la medida “responde a una necesidad urgente de visibilizar a los cuidadores informales, reconocer los determinantes sociales que les afectan y garantizar la protección de sus derechos”.
Expertos de la Universidad de Puerto Rico y de la Defensoría de Personas con Impedimentos también favorecieron el proyecto y recomendaron medidas adicionales, como el reconocimiento del “cuidador designado” en decisiones clínicas.