Por descargue y sin la presencia de una cantidad significativa de los legisladores, la Cámara de Representantes aprobó “a viva voz” el Proyecto del Senado 1 que, según sus detractores, le permitiría a empleados públicos negar servicios, amparados en sus creencias religiosas.
El proyecto de ley, que ha sido rechazado por diversos sectores y organizaciones, incluyendo el Colegio de Abogados y la Federación LGBTQ+, fue aprobado sin enmiendas y solo cuatro días después de ser avalado en el Senado.
La aprobación apresurada de la medida generó críticas de legisladores de la minoría del Partido Popular Democrático (PPD) y el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), quienes reclamaron debatir el proyecto.
“Este proyecto es innecesario ya que los derechos que se pretenden resguardar están protegidos en la legislación, normativa constitucional y jurisprudencia vigente”, afirmó en días recientes la presidenta del Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico, Vivian Godineaux Villaronga, al entender que la medida es innecesaria, fomenta conflictos y puede abrir la puerta a la discriminación.