El alcalde de Ponce, Luis Irizarry Pabón, negó que su esposa Miyady Velázquez Pagán tome decisiones de política pública dentro de su administración municipal y aseguró que solo realiza una “labor social” desde la Oficina de la Primera Dama.
En su primera entrevista a fondo con La Perla del Sur tras la polémica generada por expresiones públicas de Velázquez Pagán en torno a la homosexualidad y la cultura en la ciudad, incluso aseveró que “La política pública del Municipio de Ponce la establece el alcalde de Ponce”.
Desde el pasado mes de febrero, Velázquez Pagán ha estado en el ojo público al declarar comentarios homofóbicos en el podcast Un cura de barrio, donde señaló que las personas homosexuales están “confundidas” y que “escogieron ese método porque fueron abusadas a muy temprana edad”.
Además, se le imputa intervenir para impedir que el cantante homosexual José Alfredo cantara en un evento en Ponce y la orden para remover de la escalinata de la Casa Alcaldía la obra El alma de nuestro pueblo, de Alfredo Bauzá, por supuestamente considerarla pagana.
Según Irizarry Pabón, esas supuestas intervenciones son “falsas” y sobre el cuadro se limitó a decir que se removió porque se estaba deteriorado por hongo y que el artista fue notificado de ello mediante carta.
Igualmente, circulan por la ciudad comentarios que apuntan a que Velázquez Pagán tiene poder decisional en otras oficinas de la alcaldía. Ante eso, el alcalde expresó que “cualquiera que dice eso está lejos de la verdad”.
¿Ella tiene poder decisional fuera de la Oficina de la Primera Dama?
“El único sitio donde tiene poder decisional es en mi casa. Aquí en la ciudad de Ponce las decisiones las toma el alcalde”, respondió.
“Esté ella de acuerdo o no esté de acuerdo, pero las decisiones las toma el alcalde. Ella está haciendo una labor social que hasta ahora ha sido excelente y no interviene en ninguna decisión”, continuó Irizarry Pabón.
Velázquez Pagán realiza esa “labor social” junto a la Oficina de Bases de Fe y Alianzas Comunitarias, con un presupuesto que oscila entre $10 mil a $12 mil mensuales, confirmó el alcalde.

¿En qué consiste esa labor social?
“Lo que hace una primera dama es estar en las actividades de las comunidades, llevar recursos a comunidades que necesitan, llevar ayudas, hacer actividades como el encendido navideño. Todas estas actividades que hace una primera dama”, enumeró.
Irizarry Pabón agregó que su esposa se encargó de poner los adornos navideños junto a empleados municipales, que ha llevado “compras” a comunidades y que incluso “ha limpiado” instalaciones antes de realizar eventos.
“Es una labor social que la ha hecho con mucha dedicación y que no ha discriminado contra nadie. Eso me consta. Nosotros amamos a todo el mundo”, planteó.
Irizarry Pabón confirmó que, en medio de la controversia pública, Velázquez Pagán se fue de viaje, pero luego retomó la agenda de su oficina como de costumbre. Al volver se hizo cargo de actividades como las del Día Internacional de la Mujer Trabajadora el pasado 8 de marzo.
“Ella no toma decisiones de política pública en el municipio, las toma el alcalde. Eso que quede bien claro”, insistió Irizarry Pabón.
Entretanto, al momento de la entrevista -el 9 de marzo- el alcalde aseguró que no sabía de la existencia de querellas contra el municipio por discriminación por orientación sexual o identidad de género, o censura.
“En dos años y un mes que llevo de alcalde, (tengo) cero querellas de discrimen o de alguna situación. Nosotros no perseguimos a nadie, ni por ideas religiosas, ni por ideas políticas u orientación sexual”, manifestó. “Nosotros respetamos a todos los ponceños, los que creen y los que no creen. Y estamos aquí para defender a todos los ponceños de esta ciudad que tanto amamos”.
No obstante, Pedro Julio Serrano, activista de derechos humanos, indicó a La Perla del Sur el pasado 4 de marzo que había “querellas presentadas en diversos foros” y que se radicarían adicionales.
Por otro lado, Irizarry Pabón negó ser homofóbico.
“Aquí se ha querido implicar, inclusive escuché que 30 renuncias (que supuestamente se iban a presentar en la alcaldía) tienen que ver con una conducta homofóbica del alcalde. En ningún momento. Nosotros respetamos el valor del ser humano y, aunque yo tengo una creencia religiosa, soy cristiano, respetamos a todos, al que cree y al que no cree”, expresó.
Acto seguido, rehusó evaluar las expresiones homofóbicas de su esposa.
¿Usted reconoce que algunas de las cosas que ha dicho su esposa sí suponen conducta discriminatoria contra la comunidad LGBTTIQ+?
“Yo no te quiero abundar más de este tema, porque entiendo que se ha creado una controversia donde no la hay”, contestó.
Al insistir en una respuesta suya sobre los comentarios de Velázquez Pagán en el podcast moderado por el sacerdote católico Orlando Lugo, Irizarry Pabón dijo que “si escuchas bien la entrevista, ella no está generalizando”.
“Ella está (hablando) en la experiencia que tuvo con algunos casos, que fueron voluntariamente a pedir ayuda”, respondió.
No obstante, en el podcast, a la pregunta del sacerdote Lugo donde cuestiona a Velázquez Pagán si “¿usted le llamó confundidos a los homosexuales en esta conversación?”, la esposa del alcalde responde “Sí, sí. Yo les llamo confundidos”.
“Ella habló de sus experiencias con algunos casos, no de todos los homosexuales, no de todas las personas que han estado en algún tipo de orientación con ella”, agregó Irizarry Pabón sobre expresiones que su esposa plantea más adelante en el mismo podcast.
Esa “orientación”, según Irizarry Pabón, se la impartió Velázquez Pagán a personas que asisten a su iglesia, años atrás. Ambos han catalogado estas intervenciones como “terapias de amor”, mientras profesionales de la conducta humana han aclarado que se trata de “terapias de conversión” para intentar que una persona cambie su orientación sexual o identidad de género.
Las terapias de conversión están prohibidas en Puerto Rico. ¿Usted ha permitido que se realice ese tipo de intervención con empleados municipales?
“Eso es una falsedad, en ningún momento”, indicó Irizarry Pabón.
¿Su esposa ha dado las llamadas terapias de amor a empleados municipales de Ponce?
“Eso es negativo. La experiencia de mi esposa fue antes de venir aquí como primera dama”, dijo.
¿Desde que usted es alcalde ella no ha dado estas terapias?
“No, hace tiempo que ella no está dando algún tipo de servicio. Yo no voy a declararlo, erróneamente, terapia. Ella tuvo un ministerio en su iglesia, que es a la que yo pertenezco, donde reunía a grupos. Pero aquí en el municipio ni ha hecho servicio ni le pregunta a la gente ‘¿tú eres homosexual?, ¿tú eres heterosexual?, ¿tú tienes problema?’”, expuso Irizarry Pabón.
“Porque no tan solo ella ha trabajado con gente que le ha pedido orientación, ha trabajado con personas que tienen problemas de pornografía, adictos al sexo, todas esas cosas, alcoholismo”, añadió.
Rechaza violar separación de iglesia y estado
De otro lado, Irizarry Pabón negó que haya violado la disposición constitucional de separación de iglesia y estado, como le imputó el abogado Rolando Emmanuelli Jiménez al renunciar el pasado 3 de marzo al cargo de asesor legal del municipio.
“Respetamos los criterios del licenciado Emmanuelli, que es nuestro amigo y ha sido mi abogado por más de 30 años. Lo que puedo decir es que en ningún momento se ha violentado la separación de iglesia y estado”, expresó.
“La iglesia no toma determinaciones de lo que es el manejo del Municipio de Ponce y nosotros no mantenemos, ni damos determinaciones a la iglesia. Prácticamente, esa es la separación de iglesia y estado”, prosiguió.
Emmanuelli Jiménez no mencionó que una iglesia particular influya en el municipio, sino que le atribuyó al alcalde un fundamentalismo religioso desde el cual conduce los destinos de la ciudad.
“Respetamos los criterios de mi amigo el licenciado Rolando Emmanuelli. Si él entiende que eso ha pasado, estamos abiertos a que se haga alguna querella o alguna manifestación legal. Yo entiendo que no ha pasado. Nosotros atendemos gente que creen y que no creen y estamos claros en eso. Las decisiones de este alcalde no están basadas en mis creencias religiosas”, planteó.
¿Usted toma decisiones de política pública a base de su creencia religiosa?
“No. No. Pero sí te tengo que decir que, como cristiano, Dios me da la sabiduría para discernir”, respondió.
“Pero no tomo decisiones de lo que me diga mi iglesia o la Iglesia Católica o digan los ateos. Yo respeto a todo el mundo por igual. Todo el mundo tiene derecho a creer o no creer, pero yo tengo derecho también a tener mi filosofía cristiana, pero no tiene nada que ver en mis decisiones”, continuó.
“Yo tengo mi creencia y voy a la iglesia, pero no tomo decisiones a base de la filosofía del cristianismo”, insistió Irizarry Pabón, quien a diario publica reflexiones religiosas en su perfil oficial como alcalde en la red social Facebook.