El Departamento de Trabajo de Estados Unidos publicó una propuesta para cambiar la clasificación de trabajadores, alegando que miles de personas han sido catalogadas incorrectamente como contratistas en vez de empleados, privándolas potencialmente de las prestaciones que merecen.
Clasificar incorrectamente a un trabajador como contratista en vez de empleado le priva de las protecciones contempladas en las normas federales, fomenta el robo salarial, da a ciertos empleadores ventajas injustas sobre otros negocios y perjudica a la economía, afirmó el Departamento el martes.
La reacción bursátil de las empresas de contratistas independientes fue inmediata. Las acciones de las compañías de taxis por app Lyft y Uber cayeron en un 13 por ciento en las primeras operaciones.
Una clasificación errónea puede privar a los empleados de protecciones bajo las leyes de salario mínimo y del pago de horas extra, dijo el Departamento, afectando a miles de repartidores, meseros, albañiles, camioneros, meseros y otros.
“Aunque los contratistas independientes desempeñan un rol importante en nuestra economía, hemos visto muchos casos en que los empleadores clasifican erróneamente a sus empleados como contratistas independientes, particularmente entre los trabajadores más vulnerables de nuestra nación”, declaró el secretario de Trabajo, Marty Walsh, en un comunicado.
“La clasificación errónea priva a los trabajadores de sus protecciones laborales federales, como el derecho a recibir la paga completa, ganada legalmente”, añadió.
La propuesta ayudaría a empleadores y trabajadores determinar si un trabajador es un empleado o un contratista independiente bajo la Ley de Estándares Laborales.
Dan Ives, un analista de la empresa Wedbush, dijo que la propuesta constituiría un contraste agudo con respecto a años previos.
“La clasificación de empleados esencialmente pondrá de cabeza todo el modelo empresarial y causará cambios estructurales, si es que prospera”, expresó Ives.