El envejecimiento de la piel es un proceso natural. Sin embargo, gran parte de lo que vemos en el espejo no está escrito en nuestros genes.
Solo una parte del envejecimiento cutáneo es intrínseco, es decir, relacionado con el paso del tiempo y la genética.
El resto -hasta el 85 por ciento del envejecimiento visible- es extrínseco, provocado por factores externos como el sol, la contaminación, el tabaco y el estilo de vida.
Envejecimiento por el paso del tiempo
El envejecimiento intrínseco es inevitable y ocurre en todas las personas. Con la edad:
- La producción de colágeno y elastina disminuye, perdiendo firmeza.
- La renovación celular se hace más lenta, afinando la piel.
- Disminuye la capacidad de retener agua, lo que redunda en sequedad.
Aunque no podemos detener el tiempo, sí podemos optimizar el envejecimiento con hábitos saludables. Entre ellos:
- Nutrición rica en antioxidantes, vitamina C y omega 3.
- Actividad física regular para mejorar la circulación y oxigenación de la piel.
- Hidratación constante para mantener la barrera cutánea en buen estado.
El que sí podemos prevenir
Entretanto, el envejecimiento extrínseco depende de todos nosotros, ya que es impulsado por hábitos y prácticas que podemos controlar. Sus acelerantes suelen ser:
- Radiación UV (foto envejecimiento): responsable de manchas, arrugas y flacidez.
- Contaminación ambiental: genera radicales libres que destruyen el colágeno.
- Tabaco y alcohol: disminuyen el oxígeno en la piel y aceleran la aparición de arrugas.
- Mala alimentación y estrés: aumentan inflamación y daño oxidativo.
Para prevenir estos daños y mejorar la piel:
- Use protector solar a diario, incluso en días nublados.
- Haga limpieza facial de noche para retirar contaminantes.
- Evite el tabaco y reduzca el alcohol, ya que afectan la oxigenación de la piel.
- Libere el estrés y procure buen descanso, para regular la producción de cortisol.
- Consuma antioxidantes tópicos (vitamina C, niacinamida) para neutralizar radicales libres.
El envejecimiento de la piel es la suma de lo que heredamos y de cómo vivimos. Aunque no podemos cambiar nuestra genética, sí tenemos el poder de reducir el envejecimiento prematuro con prevención, hábitos saludables y tratamientos personalizados.
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The Science of Beauty ubica en el Lemon Courtyard del Melia Century Hotel.
Colaboración editorial de la doctora Dixie Cabán Acosta. Para conocer más sobre su trayectoria, pulse aquí. Para más consejos basados en ciencia puede seguirla en Instagram bajo @thescienceofbeautymd.
