El consorcio LUMA Energy solicitó al Gobierno de Puerto Rico apoyo inmediato y hasta $800 millones en fondos no federales para atender lo que describen como una crisis operativa y financiera del sistema eléctrico, agravada tras el apagón masivo ocurrido el pasado 16 de abril, Miércoles Santo.
En una carta enviada a la gobernadora Jenniffer González Colón el 21 de abril, el presidente de LUMA, Juan Saca, advirtió que el incidente reveló “la vulnerabilidad del sistema de transmisión y distribución”, incluyendo fallas en los equipos de protección que convirtieron una interrupción local en un apagón a nivel isla.
Según el documento, 25 transformadores de gran potencia están fuera de servicio, al igual que dos subestaciones y cinco segmentos críticos de líneas de transmisión. La empresa subrayó la necesidad urgente de mejoras en los sistemas de protección y control, así como la realización de un Estudio de Estabilidad Dinámica para evitar nuevas interrupciones por inestabilidad de frecuencia o voltaje.
Además del deterioro de la infraestructura, LUMA advirtió que enfrenta limitaciones presupuestarias severas. Desde agosto de 2024, opera con apenas un tercio del presupuesto que debería recibir de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) para operación y mantenimiento, y acumula una deuda de casi $200 millones con suplidores, lo que ha forzado la suspensión de compras no críticas y reducción de personal.
La empresa también expresó preocupación por la falta de fondos en la Cuenta de Reserva para Emergencias, la cual no ha sido alimentada desde finales de 2023 y debería mantener al menos $30 millones. Asimismo, LUMA aseguró haber gastado $239 millones en trabajos de restauración sin recibir el reembolso correspondiente de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
Ante este escenario, el consorcio pidió mecanismos temporales que permitan una mayor asignación de entre $500 y $800 millones en capital no federal, además del uso de la cuenta de reserva, para evitar que los costos se trasladen a los consumidores. También instaron a la gobernadora a gestionar la liberación acelerada de fondos federales y permisos urgentes para iniciar las obras necesarias.
La carta fue enviada a más de 16 funcionarios, incluyendo al zar de energía Josué Colón, el secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio, Sebastián Colón, y los integrantes del comité asesor nombrado por la gobernadora para atender la crisis energética.
La nueva postura del consorcio contrasta con lo expresado en una carta previa, difundida hace dos meses, donde aseguraban estar listos para la temporada de huracanes y destacaban avances en modernización, como el reemplazo de más de 21 mil postes, limpieza de miles de millas de vegetación y la instalación de dispositivos automatizados en la red.

 
			














































El gobierno debiera de auditar a Luma incisiva y constantemente. Es obvio que lo que existe es un despilfarro de fondos estatales y que también han de hacer lo mismo con los fondos federales (si no los auditan). Ya el pueblo de Puerto Rico ha tolerado demasiado la falta de respeto, el descaro y atropellos de esta gente…
Se advirtió desde el principio que la privatización no es la mejor solución para manejar nuestro sistema de Generación y Distribución de electricidad que es esencial para la vida de todos…