La presidenta del Sindicato Auténtico de Manejadores de Emergencias (SAME), Liz Colón Alicea, advirtió este martes que la falta de personal y supervisión adecuada en el Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (NMEAD) podría comprometer la rapidez y efectividad en la respuesta a situaciones críticas en el país.
Colón Alicea detalló que, en el Conjunto de Comunicaciones, donde se reciben las llamadas del Sistema 9-1-1 y se coordinan recursos con las oficinas regionales, solo laboran cinco operadores en lugar de los 14 que deberían estar activos, lo que genera una sobrecarga de trabajo y pone en riesgo la eficiencia del sistema.
A la escasez de personal se suma la renuncia del supervisor del área el pasado 31 de octubre, lo que —según el sindicato— dejó el centro prácticamente sin dirección. “Puede existir un protocolo para atender emergencias, pero sin el personal necesario ni una supervisión adecuada, esos protocolos no pueden ejecutarse de manera efectiva”, afirmó la líder sindical.
El sindicato también denunció que el déficit de empleados se extiende a las oficinas regionales y a todas las áreas programáticas del NMEAD, debido a la falta de beneficios y aumentos salariales que han provocado múltiples renuncias.
Colón Alicea exhortó a la gobernadora Jennifer González Colón y al Departamento de Seguridad Pública a intervenir de inmediato. “La falta de recursos humanos puede significar la diferencia entre salvar o perder vidas”, subrayó.
Entre los reclamos del SAME se encuentran mejoras salariales, compensación por funciones duales, uniformes, equipos esenciales y condiciones laborales seguras.















































