Darle un regalo útil, complacer algún antojo culinario, pero sobre todo brindarle acompañamiento y atención, son algunas de las formas de agradar a una persona con cáncer en Navidad, según el médico Humberto Guiot.
Guiot, quien es el director ejecutivo del Centro Comprensivo de Cáncer de la Universidad de Puerto Rico, puntualizó que mantener contacto con la persona es importante, ya sea a través de mensajes de texto, llamadas o videoconferencias.
Igualmente, recomendó -dependiendo del estado de salud de la persona enferma- hacerle una visita corta o acompañarle a una cita médica, un estudio diagnóstico o una toma de muestras para laboratorio.
“En muchas ocasiones el mejor regalo no cuesta nada: puede ser tan simple como escuchar, brindar calidad de tiempo y crear nuevas memorias”, afirmó.
Guiot reconoció que algunas personas podrían sentir temor de acercarse a un familiar o amigo con cáncer “porque no sabe cómo responderá ante alguna pregunta o algo que pueda decir ese ser querido”. Para solucionarlo, recomendó “pensar de antemano algunas frases de ánimo para decir”, aunque estipuló que “hay veces donde sobran las palabras y sólo es necesario callar y estar dispuesto a escuchar”.
“Lo más importante es que nuestro ser querido perciba nuestro apoyo y compañía. Hay instancias en donde podemos responder estrechando nuestra mano o extendiendo un abrazo”, destacó.
Por otra parte, el galeno propuso hacerle a esa persona un regalo útil, como una sábana, frisa, medias, guantes o sombrero con motivo navideño, así como un cojín o almohada, un termo para agua y otros líquidos, o un pastillero para medicamentos.
“En muchas situaciones durante citas y estudios diagnósticos las personas pueden experimentar frío, así que agradecerán un detalle que les abrigue, sobre todo si va de acuerdo a la época”, sostuvo.
Libros, películas o incluso la suscripción a un servicio de entretenimiento también resultan regalos apropiados.
Guiot dijo, además, que se sugiere complacer algún antojo culinario de la persona enferma.
“Este gesto debe hacerse en consulta con la persona para estar seguro de que no interfiera con alguna dieta especial o restricción alimentaria”, indicó.
Guiot hizo un llamado a tener en cuenta también a las personas cuidadoras de pacientes de cáncer.
“Podemos ofrecernos para sustituirles en algún turno para que puedan ir de compras, asistan a alguna actividad de confraternización o, simplemente, descansen y recarguen energías”, señaló.





















































