La continuidad del programa TsunamiReady en Puerto Rico enfrenta un futuro incierto por falta de fondos federales, según advirtió el director de la Red Sísmica de Puerto Rico (RSPR), el doctor Víctor Huérfano, durante una vista pública celebrada en el Capitolio.
El señalamiento se produjo en una audiencia de la Comisión de Seguridad y Asuntos del Veterano del Senado, presidida por Gregorio Matías Rosario, en la que se discutió la Resolución del Senado 48.
La medida, presentada por la senadora Nitza Morán Trinidad, propone evaluar la preparación municipal ante tsunamis tras las deficiencias evidenciadas durante la advertencia emitida en febrero.
“Este programa está en la cuerda floja”, expresó Huérfano. “Al día de hoy no tenemos respuesta sobre qué ocurrirá a partir del 1 de septiembre. Sin fondos, difícilmente se puede continuar con el programa”, alertó.
Desde 2006, la RSPR ha liderado el programa TsunamiReady en la isla. Actualmente, 46 municipios y el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín cuentan con la designación. Sin embargo, el director explicó que mantener el estatus requiere entre $25 mil a $50 mil por municipio. “Si uno solo pierde el reconocimiento, Puerto Rico entero podría quedar fuera del programa”, subrayó.
El senador Matías expresó preocupación ante posibles recortes federales: “Debemos ver este asunto como una prioridad. Puerto Rico está rodeado de agua y debemos estar preparados”.
Huérfano detalló que las guías que se siguen en Puerto Rico son idénticas a las utilizadas en estados como California y Hawaii, todas establecidas por el Servicio Nacional de Meteorología. Añadió que el conocimiento de protocolos y la participación ciudadana son fundamentales. “El evento de febrero fue real y el protocolo se activó correctamente, aunque hubo confusión en lugares como Aguadilla”, dijo.
Entre sus recomendaciones, Huérfano pidió respaldo oficial para fortalecer los programas TsunamiReady y TsunamiReady Supporters, los simulacros CaribeWave y Gran Shake Out, así como el programa educativo de la RSPR y el Negociado de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (NMEAD).
Además, propuso que todas las agencias gubernamentales, municipios, medios de comunicación, empresas privadas y entidades sin fines de lucro se involucren en los esfuerzos de preparación.
Durante la audiencia, el procurador del Ciudadano (Ombudsman), Edwin García Feliciano, también hizo un llamado a los municipios para institucionalizar los ejercicios de evacuación. “Esto tiene que volverse parte de la cultura diaria”, insistió, al denunciar que municipios como Salinas, Cabo Rojo y Bayamón no cuentan con sirenas de alerta en funcionamiento.
Consultado por el senador Ángel Toledo López sobre la instalación de sirenas, García aclaró que no son obligatorias, pero sí herramientas “poderosísimas” para alertar a gran distancia.
Representantes del Departamento de Seguridad Pública (DSP) también respaldaron mayor participación comunitaria. “Involucrar a la comunidad es clave para una planificación efectiva y para mitigar pérdidas de vida”, afirmó la licenciada Glendaliz Rodríguez.
Asimismo, recomendó revisar colectivamente los mapas de desalojo por tsunami y fortalecer la señalización de rutas y puntos de encuentro. Por su parte, Wildamaris González destacó que, aunque el programa TsunamiReady es voluntario, el DSP colabora estrechamente con la RSPR para notificar a los municipios sobre la renovación obligatoria cada cuatro años.
Finalmente, Huérfano reveló que el presupuesto del programa TsunamiReady asciende a $185 mil y que el 85 por ciento de los fondos operacionales de la RSPR provienen de asignaciones legislativas a través de la Ley 106 de 2002.
Pregunto por curiosidad: ¿que, si algo, ha aportado este programa para activar alarmas de tsunami? y: ¿cuántas veces se han tenido que activar para emergencias reales?