Ocurrió el 20 de diciembre de 2023.
Poco antes del mediodía, al papa Francisco lo desplazaban en silla de ruedas por el interior del Aula Pablo VI tras ofrecer otra audiencia pontificia semanal a cerca de siete mil personas. Y entre el público que lo esperaba a su salida estaba el alcalde de Juana Díaz, Ramón Hernández Torres.
Había llegado al Vaticano días antes para acompañar a los Tres Reyes Magos juanadinos, quienes realizaban su segunda visita oficial a la Santa Sede como embajadores de buena voluntad.
El alcalde portaba un sobre con una carta dirigida al papa e, inquieto, aguardó al instante oportuno para entregársela.
En el documento de dos páginas, Hernández Torres pedía al sumo pontífice que visitara a Puerto Rico y que intercediera para resolver el problema colonial del país.
“Como fervoroso admirador de su gesta como cabeza de la Iglesia Católica y luz que alumbra y denuncia la injusticia, le suplico que ore y se pronuncie a favor de una atención al problema colonial del pueblo de Puerto Rico entendiendo que ello no implica un respaldo a ninguna propuesta particular sobre cuál habrá de ser la solución final a dicho estatus”, planteó en su misiva.
“Cuando menos pedimos por su oración y aliento para nuestro País, que tanto lo necesita”, agregó en la misma.
Hoy, a hace 16 meses y un día de aquel encuentro, el alcalde reaccionó con asombro a la noticia del momento en la prensa mundial mientras, precisamente, acudía a la comunidad Jacaguax, donde se uniría a un acto, previamente coordinado, de ayuno y oración.
“Ha sido una noticia que ha afectado emocionalmente a toda la iglesia católica, aunque ya se reconocía la debilidad de salud que tenía”, expresó a La Perla del Sur, poco antes de las 6:30 de la mañana.
“Nos conmueve, sobre todo, porque fue un hombre que trabajó duro por la iglesia, que hizo grandes reformas y, aún en su enfermedad, ayer precisamente participó en su última presentación pública en El Vaticano”.
Sobre la oportunidad de haberle tenido de frente y haber intercambiado palabras, agregó que “fue una experiencia enriquecedora”.
“Así que bendiciones para todos los hermanos católicos y todos los hermanos del mundo, aunque no sean católicos, pero reconocen el liderato del papa, no solamente en la dirección de la Iglesia Católica, sino como hombre de Estado y emisario de buena voluntad”.
“A nombre de nuestra ciudad, nuestras condolencias para todos los hermanos y hermanas”, agregó.

















































