El 28 de octubre de 2025 será una fecha que los 3 millones de habitantes de Jamaica nunca olvidarán.
Tras incursionar por la región de New Hope, al suroeste de la isla, el monstruoso huracán Melissa amenaza ahora todo el territorio con vientos sostenidos de 185 millas por hora, marejadas ciclónicas de hasta 13 pies de altura y precipitaciones que podrían llegar a las 40 pulgadas esta semana, subraya el Centro Nacional de Huracanes (CNH) en su más reciente aviso.
De sostener estas características durante las próximas horas, Melissa no solo se convertirá en la tormenta más catastrófica que haya azotado a la nación caribeña, sino en el tercer huracán más intenso que se haya registrado en la cuenca atlántica.
A las 11:00 de la mañana, la presión dentro del huracán categoría 5 se redujo a 892 milibares, convirtiéndolo en uno más intenso que el huracán Katrina, el cual registró 902 milibares antes de tocar la costa del Golfo de Estados Unidos, en agosto de 2005.
La tormenta que se mantiene en el primer puesto es el huracán Wilma, que alcanzó una presión de 882 milibares el 19 de octubre de 2005.
Montañas: agravante no estudiado
Aun así, expertos en meteorología han advertido que la fuerza destructora de sus vientos, en combinación con las altas montañas de la isla, podrían crear ráfagas de potencia sin precedente en el hemisferio.
¿La razón? la velocidad del viento se magnifica significativamente con la altura y dos terceras partes del territorio jamaiquino son ocupadas por las Montañas Azules, la cordillera que cruza de este a oeste la nación, con alturas máximas de 7,400 pies sobre el nivel del mar.
Esto no solo abre el escenario a que residencias y edificios no soporten el embate de Melissa o experimenten una “falla estructural total”, como ha advertido el primer ministro Andrew Holness.
También coagula la posibilidad de que Jamaica enfrente una crisis humanitaria dentro de las próximas 48 horas.
Un azote de ese calibre dejaría a comunidades enteras incomunicadas, sin acceso a alimentos, a agua potable y a servicios médicos de urgencia, sin contar el efecto que podrían tener los derrumbes en zonas rurales.
Como medida cautelar, las autoridades locales han activado más de 800 refugios y personal de emergencia, aunque en la noche de ayer lunes solo 76 estaban en uso, confirmó el ministro de Gobierno, Desmond McKenzie.
“Los refugios son gratuitos y seguros”, puntualizó anoche Holness durante una transmisión por Facebook Live. “Las familias permanecen juntas y los residentes deben traer medicamentos, agua y refrigerios. Se deben ignorar los informes falsos sobre tarifas o restricciones”, agregó.
Sobre este tópico, el CNH puntualizó hoy una advertencia clara a los habitantes: “No actuar puede resultar en lesiones graves o pérdida de vidas”.
Según el pronóstico más actualizado del centro, Melissa se moverá hoy martes sobre Jamaica, a través del sureste de Cuba el miércoles por la mañana y a través del sureste o centro de Bahamas más tarde el miércoles, por lo que las advertencias de huracán siguen vigentes para esa zona del Caribe.














































