El Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico rechazó categórica y a viva voz la remilitarización de Puerto Rico en concierto y común acuerdo con las autoridades gubernamentales del país.
Así lo expresó el ente tras presentar una moción relativa al preocupante asunto en su Asamblea General 185, celebrada el pasado sábado, 6 de septiembre, cuando concluyó su convención anual.
La expresión de rechazo –presentada a modo de asunto nuevo en el máximo foro deliberativo de la institución- fue aprobada tras un extenso repaso de las consecuencias que podría conllevar un conflicto bélico en el Caribe, de materializarse los intentos de ocupación del gobierno de Estados Unidos a Venezuela, con el apoyo del aparato militar desde la isla, como ha trascendido en los medios de comunicación.
Durante la exposición de motivos referente a la expresión de repudio, se hizo una extensa relación de la longeva ocupación militar en las islas de Vieques y Culebra, particularizando en los efectos en la salud de miles de puertorriqueños, los impactos en el ambiente y en las vidas de los residentes de las islas municipios.
Igualmente, se recordaron las luchas y manifestaciones que por décadas estuvieron dirigidas a desmilitarizar las islas municipios hasta lograr la salida de la marina de Estados Unidos, primero en Culebra en el 1972 y luego en Vieques en el 2004.
“Puerto Rico aún no supera los estragos, daños físicos, emocionales y pérdidas de vidas de nuestros compueblanos, asuntos que están vivos en nuestra memoria colectiva. Aún aguardamos que se completen los trabajos para la limpieza total de las zonas impactadas de manera que finalmente podamos recuperar en paz nuestras tierras” expresó la abogada Vivian Godineaux Villaronga al reflexionar sobre el alcance de la potencial remilitarización de la isla.
“La activación de ejercicios militares en nuestro territorio con la presencia de miles de soldados, así como la visita del más alto oficial del Departamento de Guerra de Estados Unidos, representa una amenaza a un pasado que no podemos, debemos, ni queremos volver. Sería un grave retroceso en nuestro proceso de recuperación y sanación. No queremos un escenario de Guerra en el Caribe, ni con soldados o veteranos boricuas, ni nuestros hermanos caribeños”, agregó.