KIEV — Un ataque nocturno con un dron cerca del puerto ucraniano de Odesa provocó un enorme incendio y una explosión, según dijo el ejército el lunes, horas después de que Estados Unidos prometiera acciones decisivas y “consecuencias catastróficas” si Rusia emplea armas nucleares en Ucrania.
La estratégica ciudad sureña ha sufrido varios ataques con drones en los últimos días. El último golpeó una instalación militar, donde detonó munición. Los bomberos tenían problemas para contener las llamas, según el comando militar sur de Ucrania.
Mientras tanto, crecía el temor a que Rusia pudiera tratar de escalar el conflicto cuando completara lo que Ucrania y occidente consideraban como referendos ilegales en partes de Ucrania bajo su control.
Las votaciones, que terminaban el martes, se celebraban tras la huida de miles de residentes y se habían visto acompañadas de imágenes de tropas rusas que iban puerta a puerta para tratar de presionar a los ucranianos para que votaran. Se esperaba que Rusia declarase los resultados a su favor, un paso que podría dar pie a Moscú para anexionarse el territorio con el pretexto de defenderlo como propio bajo el paraguas nuclear ruso.
Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, dejó claro que Rusia pagaría un alto precio si cumplía sus amenazas veladas de emplear armas nucleares en el conflicto.
“Si Rusia cruza esta línea, habrá consecuencias catastróficas para Rusia. Estados Unidos responderá con decisión”, dijo el domingo al programa Meet the Press de NBC.
El mensaje de Washington ha sido más detallado en conversaciones privadas con sus homólogos rusos, dijo sin ofrecer más detalles.
“De modo que los rusos comprenden dónde nos encontramos. Nosotros comprendemos dónde nos encontramos. Nos preparamos para cualquier contingencia”, dijo en otras declaraciones a This Week, de la televisora ABC. “Y haremos lo que sea necesario para disuadir a Rusia de dar ese paso”.
Por otro lado, un ataque de cohetes rusos golpeó un poblado en el sureste de Ucrania y el centro de la región de Zaporiyia, según el oficial militar regional Oleksandr Starukh.
El funcionario compartió imágenes de edificios dañados y dijo que el ataque también había provocado incendios y daños en infraestructura no especificada.
Por su parte, la primera remesa de tropas rusas movilizadas por Moscú comenzó a llegar a las bases militares, según dijo el lunes el ejército británico.
En un reporte difundido por internet, el Ministerio británico de Defensa dijo que se había llamado a filas a “muchas decenas de miles”. Sin embargo, Rusia aún tenía desafíos que resolver.
“A diferencia de la mayoría de los ejércitos occidentales, el ejército ruso proporciona una formación inicial de bajo nivel a los soldados en sus unidades operativas designadas, en lugar de en instalaciones especializadas de instrucción”, indicó el Ministerio.
En circunstancias normales, se despliegan dos batallones mientras un tercero se queda atrás para instrucción. Pero en la guerra de Ucrania se despliega incluso ese tercer batallón, lo que socava su formación, según el reporte británico.
