La ayuda económica que el Gobierno de los Estados Unidos asigna a millones de personas para suplementar su compra de alimentos no se entregará el 1 de noviembre, publicó este fin de semana el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por siglas en inglés).
La determinación afectará directamente a cerca de 42 millones de beneficiarios del Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) en los estados y conlleva la congelación de la subvención en bloque que anualmente la oficina de Servicios de Nutrición de USDA remite al gobierno de Puerto Rico.
La asignación más reciente de esa oficina provee para cubrir las necesidades básicas de 1.2 millones de beneficiarios en la isla, hasta el 31 de octubre. También para cubrir los costos de manejo del programa, que en Puerto Rico es administrado por el Departamento de la Familia.
“En resumen, el pozo se ha secado”, sentencia la dirección del USDA en un atípico aviso impregnado con ataques políticos al Partido Demócrata, colectivo al que la administración del presidente Donald Trump imputa responsabilidad por el cierre del gobierno que ya cumple 27 días y se clasifica como el segundo más prolongado.
En reacción, el secretario de la Gobernación de Puerto Rico, Francisco Domenech Fernández indicó mediante declaraciones escritas este domingo que el Departamento de la Familia tiene en caja capital para responder a los beneficiarios del PAN hasta la primera semana de noviembre y planteó que continúan “conversaciones” con USDA para planificar opciones, incluyendo “ayuda por medio de fondos estatales”.
Domenech Fernández, sin embargo, no precisa cuáles.
Para el año fiscal 2024, el monto asignado al PAN fue de aproximadamente $2,930 millones, un ligero aumento respecto a los $2.8 mil millones aprobados en el año fiscal 2023.
Entretanto, la administración Trump ya confirmó que no utilizará los $5 mil millones en fondos de contingencia disponibles para mantener los beneficios del SNAP, el programa que ayuda a aproximadamente uno de cada ocho estadounidenses a comprar alimentos.
El presupuesto anual para las operaciones del gobierno federal expiró el pasado 30 de septiembre y el vigente -año fiscal 2026- debe abarcar desde el 1 de octubre de 2025 hasta el 30 de septiembre de 2026.
La ficha del tranque entre republicanos y demócratas para la aprobación del nuevo son los subsidios gubernamentales para planes médicos.
Específicamente, los relacionados con Medicaid y Medicare, además de los créditos fiscales para los planes del Obamacare.

















































Dudo mucho que la Gorda de la Fortaleza tenga un plan de contingencia para atajar la debacle de los fondos para TANF y PAN.
El reportaje no hace mención de qué los fondos estatales que se utilicen con relación al problema ante ante nos no serán reembolsados.
Todo es el resultado de tener a un loco y degenerado sexual y “convicted fellon”que, además de ser un tipejo soberbio y charlatán, ocupa la casa blanca de la nación norteamericana Obviamente son muchos los de mentalidad fronteriza que hoy se arrepienten de haber votado por esa sabandija llamada Donald J Trump…