El Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) justificó este martes en una ponencia escrita que el reciente ajuste tarifario responde principalmente al aumento en el costo de los combustibles y la compra de energía.
Asimismo, indicó en el documento que evalúa ajustes adicionales a favor de los clientes tan pronto se confirmen los fondos federales y los reembolsos identificados.
La Comisión de Gobierno, presidida por Víctor Parés, había citado al presidente y a los cuatro comisionados del Negociado para que explicaran hoy martes ante la Cámara de Representante el aumento de alrededor de $16.25 en la tarifa eléctrica.
Parés había advertido que el cuerpo legislativo examinaría las minutas y decisiones que motivaron el ajuste.
Según el comisionado asociado del NEPR, Antonio Torres Miranda, el Negociado compareció a la vista pública hoy listo para contestar cualquier pregunta relacionada con los aumentos, las pensiones y los ajustes provisionales, pero que el proceso no se permitió continuar debido a la ausencia del presidente del Negociado, Édison Avilés, quien se encuentra de vacaciones fuera del país.
“Bajo juramento y fuera de juramento dimos fe de que Édison Avilés tenía esas vacaciones programadas antes de la citación. La citación llegó un jueves, para estar aquí el martes. Él nos dejó todo preparado. No hemos dormido preparando la vista y ni siquiera se nos dio la oportunidad de expresarnos”, añadió.
Según Torres Miranda, la vista habría servido para explicar en detalle que el Negociado identificó $68 millones que podrían devolverse a los consumidores en los próximos meses, incluyendo $41 millones provenientes del Departamento de Energía federal y $27 millones adicionales por incumplimientos en contratos de suplido de gas natural.
“Estamos todo el tiempo buscando cómo devolver dinero al país. No queremos ni un aumento más. Los comisionados somos puertorriqueños y vivimos las mismas dificultades que el pueblo”, afirmó.
Torres Miranda reiteró que el aumento aprobado por el Negociado responde a los costos de combustible y a las interrupciones en el suministro de gas natural, incluyendo los efectos del pleito judicial relacionado con las barcazas de New Fortress Energy.
“Mientras ese pleito esté allí seguimos quemando diésel, y eso encarece la tarifa. Estimamos unos $27 millones que podrían devolverse si el suplidor incumplió. Ese dinero se va a diferir para que entre el primero de noviembre”, explicó el funcionario.