El presidente de la Comisión de Gobierno de la Cámara de Representantes, Víctor Parés, solicitó a la Junta Fiscal que evalúe declarar una emergencia de agua en Puerto Rico y que respalde esfuerzos para modernizar la infraestructura pluvial del país.
“Igual que la infraestructura eléctrica, la red de agua en Puerto Rico es obsoleta y antigua. El promedio de antigüedad de una tubería en la Isla es de sobre 73 años. En los estados continentales el promedio no supera los 32. A diferencia del sistema eléctrico, que se puede observar, la tubería está bajo tierra y eso hace más difícil monitorear su integridad y eficiencia”, dijo Parés en declaraciones escritas.
El legislador expresó su apoyo a la iniciativa de la gobernadora de crear la figura de un coordinador de agua y pidió a la Junta que “realice una expresión de apoyo y establezca como una de sus prioridades la reconstrucción y modernización de estos sistemas a la mayor brevedad posible”.
El representante adelantó que enviará una carta oficial a la Junta para solicitar que se incluya entre sus planes la realización de un estudio sobre el reemplazo de tuberías y estaciones de válvulas con materiales resilientes, integrando nuevas tecnologías que permitan monitoreo electrónico.
También solicitó que se desarrolle una arquitectura pluvial adaptada al cambio climático, para hacer frente a eventos como huracanes, inundaciones y sequías.
Se estima que en Puerto Rico hay cerca de 14,000 millas de tubería de agua potable.
Por otro lado, Parés informó que la Estación de Bombas de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados en Guaynabo sufrió una avería, por lo que personal de la corporación pública trabaja en la instalación de una nueva bomba.
“Esto ayudará a fortalecer el servicio de agua en las urbanizaciones Altamesa, Las Lomas, Santiago Iglesias, Summit Hills, Caparra Terrace, Caparra Heights, Residencial Villa España, entre otras comunidades del Precinto 4”, sostuvo.
Muestra adicional de la basura que hemos tenido gobernando esta isla durante décadas, enriqueciéndose, injustamente y lo peor de todo;, saqueando el bolsillo del puertorriqueño decente y trabajador. Lastimosamente es un círculo vicioso porque el pueblo los elige, ya que cada cuatro años reemplaza el vertedero político compuesto por los dos partidos principales de la isla. Dicen que cada país tiene el gobierno que se merece…