El sindicato Servidores Públicos Unidos de Puerto Rico, Concilio 95 AFSCME, exigió este jueves que la gobernadora Jenniffer González Colón elimine la obligación de usar días de vacaciones para cubrir el receso de Semana Santa, del 13 al 19 de abril.
“El querer imponer estas vacaciones forzadas es un acto injusto para muchos trabajadores”, afirmó Jessica Martínez Santos, presidenta del sindicato, en declaraciones escritas.
La organización denunció que algunos empleados no tienen balance suficiente de vacaciones, lo que podría resultar en descuentos en sus nóminas.
Además, otros servidores públicos ya tenían compromisos previos o no observan la Semana Santa como un periodo de descanso.
Martínez propuso que el gobierno permita acomodos voluntarios, incluyendo trabajo remoto o ajustes de horario, y que los días no se descuenten de licencias acumuladas.
El sindicato advirtió que la medida, anunciada como parte de un esfuerzo de ahorro operacional, ignora las realidades laborales y personales de cientos de empleados públicos.
El líder sindical pidió sensibilidad, ya que esta decisión podría afectar económicamente y emocionalmente a muchas familias trabajadoras.