Un descorazonador reporte sobre la inflación está golpeando Wall Street el jueves, donde las acciones van cayendo a sus niveles más bajos en casi dos años.
El S&P 500 caía en 2.2 por ciento en la sesión de la mañana al reportarse que la inflación no está amainando y en lugar de ello se está extendiendo más ampliamente por la economía.
Eso está forzando a los inversionistas a prepararse para la continuación de grandes aumentos en las tasas de interés por la Reserva Federal para tratar de controlar la inflación y el potencial de recesión que eso crearía.
El Dow Jones se desplomó 528 puntos (1.8 por ciento) para situarse en 28,719 puntos, a las 9:39 de la mañana (hora del este de Estados Unidos) y el Nasdaq estaba 3 por ciento abajo.
Las acciones en Wall Street han perdido ya una cuarta parte de su valor este año en medio de temores sobre la peor inflación en cuatro décadas y el duro remedio de la Fed para tratarla. El S&P 500 tocó su punto más bajo desde inicios de noviembre del 2020.
La mayoría de los inversionistas llegaron a la sesión matutina pensando ya que la Fed iba a subir su tasa referente por tres puntos de porcentaje el mes próximo, lo que sería la cuarta alza consecutiva de esa magnitud.
Pero los datos decepcionantes del jueves significan que muchos inversionistas ahora esperan un quinto incremento similar en diciembre, apagando las expectativas de que el banco central pudiera comenzar a reducir sus incrementos pronto.
Muchos piensan ahora que la Fed pudiera elevar la tasa por encima de 5 por ciento para comienzos del año próximo. Este año comenzaron virtualmente en cero.
Tasas más altas hacen más costoso comprar viviendas, vehículos o cualquier cosa comprada con crédito y el objetivo de la Fed es que eso desacelere la economía y el mercado laboral lo suficiente para debilitar la inflación. Pero eso toma un tiempo largo para tener efecto y la Fed se arriesga a causar una inflación si se excede.