Las autoridades dominicanas dijeron ayer que buscan abrir una causa penal contra una compañía de plásticos con base en las evidencias encontradas durante la investigación sobre la explosión ocurrida esta semana que dejó al menos 31 personas muertas.
La policía y el Ministerio Público dijeron en un comunicado conjunto que la explosión se registró en la empresa Vidal Plast, y no en una panadería como habían dicho las autoridades en un principio. El incidente tuvo lugar el lunes en la tarde en un bullicioso centro comercial en San Cristóbal, una ciudad al oeste de la capital, Santo Domingo.
“El Ministerio Público tiene evidencias que comprometen la responsabilidad penal de responsables que, con sus acciones, causaron la muerte a decenas de personas y provocaron pérdidas millonarias”, señala el comunicado, que cita palabras de Fadulia Rosa Rubio, fiscal titular de San Cristóbal.
El ministerio afirmó que continuaba investigando a varias personas, pero no dijo quiénes eran.
No se pudo establecer contacto con los propietarios de Vidal Plast para conocer sus comentarios. La compañía se dedica al reciclaje, compra y venta de materiales plásticos, según los funcionarios.
Las autoridades también dijeron que tienen pruebas de que hubo un incendio en marzo en la empresa causado por una chispa y una sustancia química, y de que la compañía no adoptó medidas “a pesar de saber el elevado riesgo de sus operaciones”.
Víctor Bisonó, ministro de Industria, Comercio y Mipymes, dijo a la prensa que la municipalidad ya había clausurado antes la empresa pero no dio detalles.
N Digital, un periódico en internet de República Dominicana, informó que, de acuerdo con uno de los fundadores de Vidal Plast, la empresa no estaba en funcionamiento y dos de sus empleados simplemente retiraban material del lugar cuando sobrevino la explosión, la cual causó la muerte a uno de ellos.
También el viernes, funcionarios aumentaron de 28 a 31 la cifra de fallecidos en la explosión. Dijeron que siete de las víctimas fatales han sido identificadas. El jueves, el gobierno dijo que podría tardarse hasta tres meses en identificar a todos los fallecidos por la explosión.
El incidente también dejó 59 personas heridas, la mayoría de las cuales siguen hospitalizadas.
