Miguel Rivera Bonilla, de 64 años y residente en Juana Díaz, fue acusado de matar a su hermano, abandonar el cadáver en un vertedero clandestino en Santa Isabel y luego quemar su automóvil.
La víctima en este caso es Marcos Rivera Bonilla, de 76 años, quien fue encontrado el 6 de diciembre de 2024 en la carretera PR-543.
Según la Policía, los hermanos, quienes vivían juntos en el barrio Río Cañas de Juana Díaz, tuvieron una discusión. Miguel, presuntamente, atacó con un objeto contundente a Marcos y le provocó la muerte.
Posteriormente, Miguel llevó el cadáver a Santa Isabel, lo cubrió con basura y escombros. Además, quemó su vehículo de motor.
En principio, el caso se investigó como una muerte sospechosa. Sin embargo, la conclusión del Instituto de Ciencias Forenses sobre la causa y manera de muerte, así como la identificación del occiso, llevó a la Policía a cambiar su clasificación.
Miguel Rivera Bonilla fue acusado ayer de asesinato en primer grado, un cargo por el artículo 6.06 (objeto contundente) de la Ley de Armas, así como un cargo de destrucción de evidencia y un cargo por intimidación a testigo del Código Penal.
La jueza Sophia Ramos Ríos, del Tribunal de Ponce, determinó causa para arresto contra el imputado y le impuso una fianza de $300 mil.
Debido a que el acusado no prestó la suma, fue ingresado en el Complejo Correccional Las Cucharas en Ponce.
La vista preliminar se pautó para el 23 de enero.