Un gran jurado federal en el Distrito de Puerto Rico acusó a 23 miembros de una violenta ganga en Aguadilla por conspiración para distribuir drogas, posesión y distribución de sustancias controladas, y violaciones de armas de fuego.
El caso fue investigado por el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) y la Policía de Puerto Rico, con el apoyo de la Fuerza de Choque de Aguadilla.
“Las organizaciones criminales como la que desmantelamos hoy dañan a nuestras comunidades con el tráfico de drogas y la violencia”, afirmó el fiscal federal W. Stephen Muldrow en declaraciones escritas.
“Seguiremos enfocando nuestros recursos para sacar a los miembros de gangas violentas de las comunidades y así permitir que los ciudadanos vivan en paz”, agregó.
La acusación alega que, desde 2015, la organización traficaba cocaína, crack y marihuana cerca del residencial La Montaña en Aguadilla, obteniendo ganancias significativas.
Los acusados operaban puntos de drogas que cambiaban de ubicación para evitar ser detectados por las autoridades, usaban mascarillas para evitar su identificación y pedían identificación gubernamental a los compradores.
Los miembros de la ganga asumían roles como líderes, ejecutores, vendedores y facilitadores, utilizando la violencia para intimidar a rivales y disciplinar a sus propios miembros.
Ocho de los acusados también enfrentan cargos por posesión de armas de fuego en apoyo al narcotráfico.
Si son declarados culpables, los acusados enfrentan sentencias de entre 10 años y cadena perpetua, además de una posible confiscación de bienes valorados en $6.8 millones.
Todos los acusados se consideran inocentes hasta que se demuestre lo contrario en un tribunal.