Jalen Brunson se había recriminado por la derrota de los Knicks en el primer partido de las semifinales de la Conferencia Este. Insistió en que tenía que mejorar en el segundo compromiso.
Hasta el descanso no estaba ni cerca de cumplir su objetivo.
Volvió a lucir errático con su disparo y evidenció molestias en el tobillo derecho. Se dijo a sí mismo que debía luchar contra todo.
«Sólo tuve que encontrar una forma de que mi mentalidad se fortaleciera», relató. «Salí dispuesto a hacer las cosas».
Las hizo, y Nueva York está de vuelta.
Brunson consiguió 30 puntos y encendió justo a tiempo el ataque que requerían los Knicks para vencer el martes 111-105 a un Heat de Miami carente de Jimmy Butler, lo que igualó las semifinales de la Conferencia Este a una victoria por bando.
Julius Randle regresó tras sufrir un esguince en el tobillo izquierdo, que lo marginó del primer partido de la serie. Contabilizó 25 puntos, 12 rebotes y ocho asistencias.
Por su parte, RJ Barrett anotó 24 puntos para los Knicks, quintos preclasificados. Josh Hart finalizó con 14 puntos, 11 rebotes y nueve asistencias.
«Pienso que Julius sacó esto adelante con agallas. Jugó con mucha fuerza. Y creo que Jalen fue fantástico», comentó el entrenador Tom Thibodeau. «RJ tuvo un gran inicio de partido para nosotros, así que tuvimos a varios jugadores que dieron un paso al frente».
Pero Brunson fue el protagonista. Había errado sus siete triples en el primer duelo de la serie. Esta vez, fue quien aportó las mejores jugadas durante un partido en que los Knicks estuvieron en desventaja la mayor parte del tiempo.
Caleb Martin anotó 22 puntos en reemplazo de Butler por el Heat, que será anfitrión del tercer partido, el sábado por la tarde. Miami confía en tener de regreso a Butler, el líder anotador en los playoffs, quien sufrió un esguince en el tobillo derecho durante el primer partido, una victoria por 108-101.