Los Celtics han mirado hacia el abismo cuatro veces en esta postemporada. Y no han parpadeado siquiera.
Derrick White anotó 24 puntos en una noche en que atinó seis triples, y los Celtics de Boston doblegaron anoche 110-97 al Heat de Miami, para extender de nuevo la serie final de la Conferencia Este.
Marcus Smart totalizó 23 unidades y cinco robos. Jayson Tatum y Jaylen Brown finalizaron con 21 tantos por cabeza y los Celtics se anotaron su segundo triunfo consecutivo, para reducir a 3-2 la ventaja de Miami en la serie.
El resultado mantuvo vivas las esperanzas de Boston, de ser el primer equipo en la historia de la NBA en reponerse de un déficit de 3-0 para ganar una serie. Los 150 equipos previos que han estado en esa situación han terminado cayendo.
“Tenemos que hacer lo que sea necesario para lograr la victoria”, comentó White.
Boston sobrevivió también a dos partidos en los que corría el riesgo de eliminación ante los 76ers, en la segunda ronda de los playoffs.
“Esto simplemente nos dice que estamos entre la espada y la pared, y que debemos seguir unidos, compitiendo en un alto nivel para darnos una oportunidad”, comentó el técnico de Boston, Joe Mazzulla.
El sexto partido está previsto para el sábado en Miami, donde el Heat buscará ser el segundo equipo que, tras avanzar como octavo preclasificado, llega a las Finales de la NBA bajo el formato actual, que se remonta a 1984.
“Siempre tenemos que mantenernos optimistas, sabiendo que podemos ganar la serie y la ganaremos”, puntualizó Jimmy Butler, el astro del Heat. “Sólo tenemos que definir en casa”.
Duncan Robinson encabezó al Heat con 18 puntos. Bam Adebayo añadió 16 y capturó ocho rebotes.
Butler totalizó 14 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias, pero se quedó en el banquillo durante los últimos 9:47 minutos. Caleb Martin finalizó con 14 tantos.
Fue el partido con menos puntos de Butler en esta postemporada. Aportó 16 en el tercero, una paliza propinada por Miami.
“Lo que pasa en un partido no se prolonga en el siguiente”, advirtió el técnico de Heat, Erik Spoelstra. “No importa. Lo importante es prepararnos colectivamente y dar un gran encuentro. Jugaremos mucho mejor el sábado. Eso es lo que debemos tener en mente ahora”.
