Con miras a uniformar los procedimientos de investigación de los casos de violencia de género, la alta oficialidad de Operaciones de Campo del Negociado de la Policía evaluó en una sesión especial los modos de integrar los enfoques comunitario, humanitario y empático hacia las víctimas en la implantación del protocolo recientemente adoptado para atender estos incidentes.
El comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa, encabezó el cónclave que reunió a todo el componente de la superintendencia auxiliar de Operaciones de Campo, que abarca a los coroneles y comandantes de las trece áreas policíacas, así como a los directores de las divisiones de Tránsito, Operaciones Tácticas, entre otros.
También participó como recurso la doctora en Sicología Social Comunitario, Ilia Marie Vázquez Gascot, con amplia experiencia en proyectos de las organizaciones no gubernamentales dirigidos a la prevención y erradicación de la violencia por razón de género.
Según explicó la directora de la Unidad de Crímenes contra la Mujer y Violencia Doméstica, Aymee Alvarado Cardona, también discutieron los avances y actualizaciones de las estadísticas y otros trabajos en el Centro de Operaciones y Procesamiento de Órdenes de Protección, así como los planes para mejorar las colaboraciones con las policías municipales y las entidades no gubernamentales.
«Para la Policía es importante que nuestros oficiales dominen y sepan transmitir, en sus comunicaciones e instrucciones a sus subalternos, la visión social y humanitaria que debe guiar las investigaciones de las escenas de violencia. La internalización del enfoque de trato sensible y empático a las víctimas ayudará a los agentes a todos los niveles a ser más eficaces y hacer el trabajo con solidaridad y respeto hacia las víctimas de violencia», declaró López Figueroa.
Por su parte, Alvarado Cardona, indicó que «aunque los protocolos de la Policía siempre han contemplado procedimientos abiertos, donde no se descarta ningún móvil, con el protocolo recién adoptado se le da uniformidad al proceso de investigación de los asesinatos por razón de género. Además, nos facilita canalizar los servicios a los que tienen derecho las víctimas».
«El Protocolo tiene la finalidad de proporcionar una guía para las investigaciones criminales relacionadas a muerte violentas de mujeres y personas trans. De igual modo, brinda herramientas para garantizar los derechos de las víctimas, sobrevivientes y sus familiares, así como de los testigos durante el proceso de investigación y procesamiento», añadió Alvarado Cardona.
Según dijo, el Protocolo de Investigación de las Muertes Violentas de Mujeres y Personas Trans por razones de Género, adoptado desde el año pasado, es claro y complementa el manual de investigación criminal que ya seguía la Policía, contiene estrategias recomendadas por el comité PARE y fue revisado por varias organizaciones no gubernamentales.