Ya es ley el Proyecto de la Cámara 1769 que crea el Programa de Acopio, Reúso y Reciclaje de Asientos Protectores.
Con la firma del gobernador Pedro Pierluisi, se da paso a una iniciativa que permitirá recolectar y reutilizar asientos protectores y elevados para menores.
Esto beneficiará a las familias que no cuentan con los recursos económicos suficientes para adquirir estos equipos esenciales para la seguridad infantil.
La Ley Núm. 22-2000, según enmendada, conocida como Ley de Vehículos y Tránsito de Puerto Rico, establece que es obligatorio para toda persona que conduzca un vehículo de motor en el cual viaje un niño menor de cuatro años, asegurarse de que dicho niño se encuentre sentado en un asiento protector.
También, es obligatorio para toda persona que conduzca un vehículo de motor por las vías públicas, en el cual viaje un niño entre las edades de cuatro y nueve años o que mida 4 pies y 9 pulgadas, lo que suceda primero, asegurarse de que dicho niño se encuentre sentado en un asiento protector elevado.
“No obstante, cada día más personas carecen de los recursos económicos necesarios para adquirir un asiento protector o un asiento protector elevado. Además, la condición económica de Puerto Rico limita la capacidad del Estado para sufragar este gasto necesario”, lee la exposición de motivos de la medida.
“Por otro lado, hay muchas personas, hospitales y otras entidades relacionadas que tienen estos equipos en buenas condiciones y por diferentes razones ya no los necesitan, de manera que pueden fácilmente cederlos para que sean utilizados por personas que sí lo requieren”, continúa.
Con la medida convertida en ley será posible recibir, reusar y reciclar asientos protectores o asientos protectores elevados, haciéndolos disponibles para las personas carentes de los recursos económicos suficientes para adquirirlos.