Enrique Garcerán, el sobresaliente chef internacional que convirtió a Ponce y Puerto Rico en su nuevo hogar, falleció anoche a consecuencia de un trágico accidente automovilístico.
De inmediato, la noticia ha provocado consternación y desconsuelo entre quienes le conocieron y disfrutaban con frecuencia de su inagotable talento, visión y camaradería.
El joven e inquieto Garcerán nació en Madrid, España. Por su innata pasión, logró el ingreso al Instituto Le Cordon Bleu en Londres, donde obtuvo el Grand Diplome en Artes Culinarias, para luego trasladarse a Bangkok, donde se especializó en cocina tailandesa y años más tarde a Bolivia, donde ejerció como profesor de gastronomía profesional.
Luego laboró durante casi siete años en influyentes hoteles y restaurantes de la República Dominicana, como El Embajador, Casa de Campo y el altamente cotizado restaurante Mijas, para luego recibir una oferta por parte del arquitecto y empresario hotelero Abel Misla Villalba, quien llevaba tiempo tras la búsqueda de un chef de calibre internacional para el lanzamiento del restaurante Baleares, corazón del renovado Meliá Century Hotel y ancla de la cadena Misla Hospitality Group.
Allí desarrolló con éxito espontáneo una carta de cocina mediterránea de acerbo cosmopolita, sabores clásicos y pinceladas intrínsecamente sofisticadas, además de una cultura insaciable entre comensales por el descubrimiento de sabores, aromas y texturas.
Al completar la labor, Garcerán emprendió otro proyecto de la mano del empresario Javier Bustillo y el cotizado restaurante ponceño Níspero, donde el chef siguió desarrollando platos excepcionales, al igual que el gusto por la mejor cocina intercontinental, con acentos para el paladar local.
A Garcerán le sobreviven su esposa y dos hijos, quienes residen en Ponce.
Tuve la oportunidad de conocerlo un ser excepcional humilde y profesional. Mi más sentido pésame a sus familiares y Amigos. ♨️ QEPD y que brille para él la luz perpetua y descanse en Paz. Amén
Tuve el honor de conocerlo cuando le preparé su página web. Era una persona excepcional, talentosa, profesional, pero a su vez humilde. Hoy hemos perdido un gran talento y ser humano. Que descanse en paz.
No le conocí, pero es siempre triste y lamentable la pérdida de un joven tan talentoso, y padre de dos hijos. Dios lo reciba en Su regazo, y dé mucha fortaleza y aceptación a su familia.