Un proyecto que otorga incentivos bajo la Ley 60 para la construcción de viviendas en los cascos urbanos de los municipios fue convertido en ley ayer, jueves, por el gobernador Pedro Pierluisi Urrutia.
El Proyecto de la Cámara 2172 enmendó el Código de Incentivos de Puerto Rico para crear el Crédito Contributivo por Inversión Elegible en Centro Urbano.
Las inversiones que se hagan en estos proyectos desde el 1 de julio de este año podrán beneficiarse de incentivos fiscales, como una contribución fija preferencial de 4 por ciento sobre ingresos por ventas o arrendamiento.
Igualmente, se estipula una exención del 75 por ciento en contribuciones sobre la propiedad y un 50 por ciento en patentes y arbitrios municipales. Para los contratistas y subcontratistas, la exención en arbitrios municipales será de 75 por ciento.
Además, los desarrolladores podrán solicitar créditos contributivos de hasta el 40 por ciento de la inversión elegible, con decretos de exención fiscal que tendrán una vigencia de 15 años.
La medida establece que “solo se considerará como Inversión Elegible de Casco Urbano aquellas cuyos fondos son utilizados en su totalidad única y exclusivamente para la adquisición de terrenos, estructuras, construcción y desarrollo de un proyecto de propiedad mueble para uso residencial localizada en un Centro Urbano, según establecido en la Sección 2071.01(11) de este Código”.
Las viviendas se pueden poner a la venta o en arrendamiento. El crédito es aplicable, además, a propiedades en estado de abandono o estorbos públicos.
La solicitud de exención debe presentarse en o antes del 31 de diciembre de 2025.