Rusia consideró el viernes positivamente la iniciativa de paz del papa Francisco para Ucrania, pero subrayó que de momento no hay planes para una misión del Vaticano a Moscú.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, dio a conocer su postura a la agencia noticiosa estatal RIA Novosti y es el primer reconocimiento público de Moscú sobre la intervención papal.
Su expresión sigue al anuncio el fin de semana del Vaticano de que Francisco nombró como su enviado al cardenal italiano Matteo Zuppi, un veterano de la Iglesia católica en iniciativas de mediación de paz.
“Reconocemos el sincero deseo de la Santa Sede de impulsar el proceso de paz”, dijo Lavrov, según RIA Novosti.
“Al mismo tiempo, la parte vaticana no ha adoptado medidas prácticas para organizar el viaje a Moscú”, agregó.
Zuppi dijo ayer a la prensa que el alcance de la misión era “ayudar a disminuir las tensiones del conflicto” con la esperanza de que pueda contribuir a los “caminos de la paz”.
Hizo un paralelismo con sus esfuerzos en la década de 1990, acompañado de la Comunidad de Sant’Egido, con sede en Roma, que contribuyó a mediar en las conversaciones de paz que pusieron fin a la guerra civil en Mozambique.
Entonces también, destacó Zuppi, la iniciativa de la Iglesia comenzó con una esperanza de encontrar “caminos de paz” y resultó en reuniones que acercaron a las partes beligerantes con “lazos tejidos” entre facciones y en última instancia un acuerdo de paz.
“El esfuerzo (en Ucrania) será definitivamente en ese sentido”, declaró Zuppi, al término de una reunión de la Conferencia Episcopal Italiana. “Veremos”.
Francisco anunció la existencia de una misión de paz cuando regresaba al Vaticano el mes pasado desde Hungría, donde se entrevistó con el enviado de la Iglesia ortodoxa rusa, que ha apoyado con vehemencia la guerra del Kremlin.